Algunos congresistas han anunciado el avance de 1/5 retiro de los fondos previsionales para ayudar a la gente que tiene problemas económicos derivados de esta pandemia que nos ha azotado bastante fuerte. Por su parte el actual Gobierno, donde varios de sus miembros fueron acérrimos defensores de los proyectos anteriores, ahora dice que los retiros no son válidos porque dañan la economía. ¿Pero qué bemoles hay detrás de este posible quinto retiro?
Hemos visto en las tres ocasiones anteriores, aunque hubo cuatro tramitaciones el cuarto retiro que se promovió no fue aprobado, que ha ingresado a la economía mucho circulante generando una presión al alza de los productos que se ha traducido en inflación. Entonces uno de los principales argumentos de quienes promueven estas iniciativas es “que ayuda a las personas de menores ingresos”.
Para este quinto retiro sabemos que ya hay una gran cantidad de gente que no tiene fondos disponibles, por lo que no les beneficiaría en nada. Es más, les afectaría por partida doble: no tendrían dinero para retirar y el efecto inflacionario que se produciría les pegaría directamente en sus finanzas familiares. Por otro lado, y como es obvio, para quienes tienen dinero en las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) es atractivo el retiro, pues parece que prefieren disponer a voluntad de su dinero que solo dejar los recursos de su propiedad en manos de estas empresas.
Pero eso no va a beneficiar a mucha gente y como dijimos, una de las consecuencias de este eventual quinto retiro sería contar con más circulante en la economía y una mayor presión hacia el alza de precios porque aumentaría la demanda de bienes. El Gobierno a través de su Ministro de Hacienda dice que no está a favor de un nuevo proyecto porque eso no es lo mejor para la economía y tampoco para los trabajadores en términos de asegurar la pensión futura. El tema relevante es que muchos ya no tienen fondos disponibles y, a duras penas están con el IFE y algún beneficio estatal.
Es obvio que el Gobierno va a tener que lidiar con esta iniciativa y buscar fórmulas que sean equilibradas y no sigan provocando más gente sin fondos en la AFP. Ya los retiros no tienen el mismo impacto que tuvieron al comienzo.
Acá vale señalar lo expresado por el Ministro de Hacienda, Mario Marcel quien sostuvo que “siendo presidente del Banco Central fue muy distinta la manera en que comentamos y los antecedentes que dimos respecto del primer retiro y respecto del tercero y cuarto. Y eso es porque la situación económica fue cambiando, el primer retiro se produjo en el momento de mayor deterioro de la situación económica, a mí no me cabe duda de que contribuyó a agilizar la recuperación o dar vuelta el ciclo económico”. Y el otro punto es que el perfil de las personas ha cambiado. Desde el tercer retiro se ha concentrado más en trabajadores con mayores saldos en sus cuentas de capitalización.
Si avanza este quinto retiro su impacto social no sería tan positivo como lo fue quizá el primero o el segundo, pero dejaría a más de 5 millones de personas sin fondos en sus cuentas individuales y eso es algo que tiene un coletazo grande en el largo plazo. ¿Quién financiaría la pensión de esas personas? ¿Y cómo se financiarían?
Víctor Nocetti Núñez
Director Carrera Ingeniería Comercial
Universidad Santo Tomás, Talca