TALCA.- El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción de la Región del Maule, Rodrigo Vargas, analizó la compleja situación que enfrenta el sector debido a la pandemia y recalcó que es necesario inyectar confianza en el mercado nacional porque la actual crisis se va a prolongar por los próximos dos o tres años y “nos va a costar levantarnos”.
En este sentido, apuntó que “los temas de expectativas son muy, muy importantes” y “en la medida que podamos atacar la creación de empleo vamos a ir repuntando de forma importante; pero esta crisis nos va a pegar por dos o tres años”.
Vargas expresó que su mensaje al gremio de la construcción es que “de esta salimos todos juntos” y adelantó que “estamos trabajando con nuestros socios para que ojalá no tengamos bajas que lamentar en la región” porque “las empresas se han debilitado de forma importante”.
En conversación con El Maule Informa explicó que “la construcción a nivel nacional está muy afectada. Nuestra región ha tenido una afectación menor, pero no por ello menos complicada. Hemos perdido 4 mil empleos, destruidos por la pandemia”.
Agregó que hay “una pequeña recuperación en los últimos meses respecto de los niveles de 2019”, pero no se compara con el crecimiento que la actividad venía experimentando un año atrás.
En este sentido, la construcción ha tenido “problemas de sobrecostos, flujo de caja, suministros, problemas de todo tipo”.
De hecho, se estima que construir una vivienda social hoy tiene un sobrecosto de unas 45 Unidades de Fomento por unidad, por lo que “si uno considera que el margen no es muy amplio, significa un problema complejo”.
En todo caso, la situación en la Región del Maule ha tenido menos dificultades que otras debido a que ha habido menos cuarentenas.
Stock de viviendas
Respecto del stock de viviendas, indicó que se debe hacer una distinción entre panorama nacional y local. A nivel país se detuvo la venta y construcción, por lo que se mantiene un cierto equilibrio entre unidades producidas y unidades adquiridas
En el Maule se ha producido un retraso importante en todas las obras porque la operación ha sido difícil contoda la cadena productiva, es decir con los servicios públicos, con los servicios privados, con los proveedores, adquisición de materiales, notarías, conservadores, etc.
Añadió que “los plazos de entrega se fueron disparando, lo que ha generado equilibrio, por lo que no hay un gran stock acumulado”.
Protocolos sanitarios
Vargas estimó que la actual crisis es similar a la de 1982 y más fuerte que la de 2008. “Ha pegado muy fuerte en todos los sectores, pero el Maule ha sido más resiliente”.
Sin embargo, observó que “con cuarentena en Talca la situación cambiaría radicalmente”.
En todo caso, recalcó que “hemos avanzado mucho con los protocolos sanitarios, que son hoy muy estrictos” y aseguró que la actividad en la región registra niveles de contagio muy bajos con relación al resto del país.
“La construcción -dijo- es una actividad segura, por lo que puede trabajar en tiempos más difíciles. Queremos trabajar porque somos seguros y lo hemos demostrado”.
Incertidumbre
Sobre las consecuencias que han tenido el estallido social y la pandemia, indicó que “toda actividad económica es sensible a la incertidumbre; si hay incertidumbre evidentemente hay efectos”.
Respecto del futuro, explicó que “hoy tenemos una inyección importante de inversión pública para sostener la actividad de la construcción. Pero la inversión privada es fundamental para lograr una actividad y un crecimiento estable”.
Agregó que “tenemos que cambiar las expectativas y las realidades atacando varias áreas para transmitir la importancia de la inversión para construir mejores ciudades a fin de lograr una mejor calidad de vida. Si las personas valoran la calidad de vida, vamos a construir mejores condiciones para todos generando políticas públicas que lo hagan”.
El dirigente gremial recalcó que es necesario “poder tener una actividad segura para un impacto más acotado” ya que “hay muchos proyectos que quedan detenidos por incertidumbre económica en cuanto a la demanda y si se podrán desarrollar en forma secuencial. Esto, porque partir y paralizar una obra varias veces tiene un impacto brutal ya que con los márgenes que existen bien podrían salir a pérdida al dispararse los costos”.
En todo caso, Vargas indicó que hay una cartera de proyectos muy importante que está desarrollando el Ejecutivo, como construcción de caminos, infraestructura hídrica y de vivienda social, además del by pass de Talca que debiera impactar de forma muy positiva la actividad económica de la región.
Sobre el rol de los bancos en la actual coyuntura, indicó que “están cumpliendo en este momento la función que deben cumplir” pues “la adquisición de viviendas tiene que ver con la posibilidad de acceder a un crédito hipotecario con tasas convenientes. Las tasas son hoy muy convenientes y eso ayuda a revitalizar un sector donde la demanda está resentida; la demanda se resiente por problemas de expectativas y empleo”.
Agregó que las personas que tienen empleo estable pueden aprovechar estas bajas tasas y eso ha equilibrado un poco el mercado para que no se sienta fuertemente la acumulación de stock manteniendo los precios estables.
Sin embargo, no hay mucho espacio para bajar porque los márgenes no son tan amplios.
Pero, observó que “el problema que vemos con la banca son las restricciones que tiene para financiar nuevos proyectos. El hecho de no tener la película muy clara respecto del futuro los tiene muy restringidos en la concesión de créditos. Si uno no tiene un financiamiento claro, es difícil partir nuevos proyectos”.
En este sentido, indicó que los dirigentes nacionales de la Cámara tienen reuniones con autoridades de los diversos sectores para “deshacer nudos e inyectar confianza al sistema. Los temas de expectativas son muy, muy importantes y nos van a afectar por los próximos dos o tres años. Nos va a costar levantar”.
“En la medida que podamos atacar la creación de empleo vamos a ir repuntando de forma importante, pero esta crisis nos va a pegar por dos o tres años”, aseguró.
“Ahora tenemos mejores herramientas para sortear este temporal que vamos a tener que navegar por los próximos 2 o 3 años. Tenemos cifras alentadoras en cuanto a pandemia, pero no debemos descuidarnos. Las cifras de Europa nos llaman a ser súper prudentes en cada uno de los pasos que vamos dando”, concluyó.