Una de las patologías del sueño más recurrentes en hombres es la roncopatía, la cual se produce por la vibración de las partes blandas de la garganta al momento de tomar aire durante el dormir, con una prevalencia de 40% en la población adulta masculina, según datos del Instituto Europeo del Sueño.
Luciano Femopase, neurólogo de Clínica Somno, explica que roncar no es normal, sino que “es una enfermedad que está subdiagnosticada y que los pacientes no consideran grave, pero la realidad es muy distinta, ya que, muchas veces quienes lo experimentan, especialmente cuando se asocia a apneas del sueño, presentan una presión arterial alta y favorece el estado de somnolencia diurna, lo que puede derivar en falta de concentración y dolores de cabeza”.
Ante esto, el especialista agrega que el trastorno de apnea del sueño consiste en pausas en la respiración que interrumpen momentáneamente el flujo de aire en su totalidad, provocando a veces que el paciente se despierte con sensación de falta de aire.
De acuerdo con datos de Clínica Mayo, los hombres son 2 a 3 veces más propensos a presentar este trastorno en comparación con las mujeres, debido a que “tienden a tener vías respiratorias superiores más estrechas, lo que aumenta el riesgo de obstrucción durante el sueño. Además, los niveles más altos de testosterona pueden afectar la respiración y el tono muscular de las vías respiratorias, lo que aumenta la probabilidad de colapso y obstrucción al dormir”, explica el especialista.
Dentro de las consecuencias de este trastorno está el aumento del riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, creciendo en un 30% el riesgo de diabetes, además de elevar entre 1.6 a 2.6 veces la posibilidad de padecer depresión y, según algunos estudios, también en más de un 40% la probabilidad de sufrir alguna enfermedad neurodegenerativa como Parkinson o Alzheimer.
Por otra parte, la narcolepsia también es una patología del sueño de origen neurológico de la que se ha observado una mayor incidencia en el sexo masculino, la cual consiste una excesiva somnolencia diurna junto con cataplejías, es decir, una disminución del tono muscular brusco frente a emociones fuertes como rabia, susto, risa excesiva, vergüenza, entre otros, que pueden durar de segundos a minutos. “Uno de los exámenes claves para detectar trastornos del sueño en una persona es la polisomnografía. Además, en Clínica Somno contamos con encuestas online gratuitas en nuestro sitio web para evaluar si se padece de algún trastorno del sueño y puede ser necesario consultar con un especialista”, finaliza el neurólogo.
