El Centro de Investigación e Innovación de Viña Concha y Toro cumple ocho años desde su fundación, y lo celebra dando a conocer sus principales casos de éxito de innovación, resaltando el enfoque de adaptabilidad al cambio climático.
Uno de ellos es el inicio la plantación de las que internamente llaman “Plantas 2.0”, es decir, una vid libre de 13 virus y 5 hongos de la madera, lo que permitirá prolongar su vida útil y serán más resistentes al cambio climático, dio a conocer la empresa en una ceremonia realizada en Pencahue, Región del Maule, con la presencia de diversas autoridades.
“Hace 8 años creamos el CII, proyecto que partió como un sueño de desarrollar I+D dentro de la compañía. Hoy ya cuenta con un reconocimiento de la comunidad académica nacional e internacional y agencias públicas que desarrollan políticas en ciencia y tecnología. El CII nos mantiene a la vanguardia de la industria vitivinícola global, y nos acerca al viñedo y la bodega del futuro, desarrollando y adaptando los últimos avances de la ciencia y la tecnología”.
Este logro es el resultado del trabajo conjunto de la Gerencia Agrícola y el Centro de Investigación e Innovación (CII) de Viña Concha y Toro, de un programa que se inició en 2016 en base a la analítica más sensible que existe en el mundo, el qPCR, en base a selección sanitaria y limpieza de virus y hongos. No hay un mejoramiento genético.
“Es la primera vez que en Viña Concha y Toro se realiza una plantación de viñedos con este material vegetal superior o “Planta 2.0”, la cual consiste en una planta de vid libre de 13 virus y 5 hongos de la madera, los cuales afectan la productividad y longevidad de los viñedos”, comenta el director del Centro de Investigación e Innovación, Álvaro González.
Las plantas 2.0 serán más sanas, productivas y longevas que sus antecesoras. Serán plantas que estarán más preparadas para el cambio climático, agrega.
La primera plantación de las Plantas 2.0 se llevó a cabo en octubre en el Fundo El Triángulo de la compañía, ubicado en la Quinta Región, lo que marca el inicio de un nuevo estándar de calidad de las plantas que se hacen en el vivero de la Gerencia Agrícola de Viña Concha y Toro.
“Este importante hito ha sido el fruto de un programa de investigación y desarrollo del CII
que se inició en 2016 y que hoy ya es un caso concreto de innovación, mejorando la productividad y longevidad de nuestros viñedos y agregando valor al quehacer de nuestra área agrícola”, asegura González.
Se espera que, a futuro, Viña Concha y Toro cuente con plantas libres de 12 virus y reforzadas con trichodermas (hongos benéficos), lo que implica plantas aún más robustas que las plantadas actualmente.
18% de ahorro de agua para riego
Otro caso de éxito relevante es el riego de precisión. Hace cuatro años se dio inicio a un nuevo proyecto de eficiencia hídrica en el CII, el cual consiste en implementar un sistema de gestión de riego basado en el desarrollo de curvas de coeficiente de cultivo (Kc) en diferentes campos de la compañía, lo que en conjunto con el análisis de información meteorológica, permite calcular la demanda de agua específica para el viñedo. Es decir, cuándo regar y cuánto regar.
Actualmente este plan se encuentra aplicado a 900 hectáreas de las 10 mil plantadas que posee el holding en Chile, lo que ha llevado a ahorros de un 18% promedio en la cantidad de agua usada.
Centro de Investigación e Innovación
El Centro de Investigación e Innovación (CII) fue inaugurado en 2014 en la Región del Maule. Esta iniciativa pionera fue concebida para hacer investigación aplicada y desarrollar nuevas tecnologías en las áreas de la viticultura y enología, buscando contribuir al desarrollo y competitividad de la industria del vino en Chile y el mundo, nutriendo de conocimientos y nuevos desarrollos que permitan enfrentar los futuros desafíos del sector.
El CII cuenta con un Laboratorio Agrícola y Enológico, un Laboratorio de Biología Molecular, una Bodega Experimental y un Centro de Extensión. Cada área, que cuenta con tecnología de punta, aporta al objetivo de hacer de la industria vitivinícola una más eficiente y competitiva. A través de su Centro de Extensión y diversas alternativas de capacitación, se pueden difundir nuevos conocimientos y tecnologías para ser incorporados a las prácticas vitivinícolas y enológicas. El Centro ha logrado importantes avances en investigación aplicada a través de toda la cadena productiva, respondiendo a los desafíos de calidad, adaptabilidad y productividad de la industria.