Bajo el lema “EsMoto”, el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones presentó hoy una nueva campaña dirigida a crear conciencia respecto a la responsabilidad al momento de conducir motos de baja cilindrada (menor o igual a 50 cc) o a las que tienen motor eléctrico con potencia superior a los 250 watts. El ingreso al país de este tipo de vehículos se ha incrementado de manera importante en los últimos tres años y, en el caso de las motos de cilindrada igual o menor a 50 cc, su crecimiento ha sido de 595% en dicho período, según datos del Servicio Nacional de Aduanas.
La Ministra de Transportes y Telecomunicaciones, Gloria Hutt, explicó que “este aumento significativo debe ir acompañado de información clara respecto a la documentación que debe portar el usuario de estos vehículos, con el fin de resguardar que la persona cuenta con la debida preparación para conducir estas motos. De esta forma se evitan siniestros de tránsito y posibles víctimas y lesionados”.
A su vez, la Secretaria de Estado recalcó que “es importante que los vendedores de estas motos entreguen información clara respecto a la documentación que necesitan las personas para poder conducirlas: vale decir, licencia Clase C, permiso de circulación y que la moto haya sido homologada debidamente”.
La Secretaria Ejecutiva de la Conaset, Johanna Vollrath, señaló que “estamos educando a los conductores que utilizan motocicletas de baja cilindrada o eléctricas, sobre la importancia de informarse sobre los requisitos necesarios para poder transitar con estas motos. No sólo deben portar licencia de conducir clase C, sino también placa patente del vehículo. Conducir una motocicleta conlleva responsabilidades y destrezas que se demuestran en los exámenes para obtener licencia de conducir, por lo que significa un riesgo importante para la seguridad vial que haya conductores sin la debida documentación en nuestras calles”.
Vollrath instó a los motociclistas “a adoptar conductas seguras y responsables al conducir: insistimos en la importancia de bajar la velocidad y a no utilizar las ciclovías que son espacios exclusivos para los ciclos”
Durante el año 2020, 210 usuarios de motos fallecieron en las vías, un 21% más que 2019. En total se registraron 6.031 siniestros de tránsito en los que hubo motociclistas involucrados, con un total de 4.960 conductores de motos que sufrieron algún tipo de lesión.
Por su parte, la Jefa del Programa de Fiscalización del MTT, Paula Flores, agregó que “nos preocupa que los conductores de este tipo de vehículos circulen por las calles con la documentación y exigencias que señala la normativa, entre ellas, la documentación del vehículo y la licencia profesional. Así es como nuestros inspectores han duplicado la cantidad de controles e infracciones en comparación con el año 2020 y han concretado hasta 16 veces más retiros de este tipo de vehículos por no cumplir con la norma”.
En lo que va de este año, se han realizado 5.959 controles a motos particulares, lo que implica un 90% de aumento respecto de todo el año 2020. Además, durante este periodo se han cursado 2.159 infracciones y se han retirado 345 vehículos de este tipo por no portar la documentación necesaria, lo que se traduce en un incremento de 89% y 1.542%, respectivamente, comparado con 2020.
La Jefa de Zona de Tránsito, Carreteras y Seguridad de Carabineros, General Marcela González, señaló que “el principal compromiso de Carabineros es cuidar la vida de todas las personas y es por ese motivo que trabajamos de manera permanente, desplegados en carreteras, avenidas y calles de nuestro país 24/7. Todo con el firme propósito de fiscalizar para prevenir que se produzcan accidentes de tránsito que puedan generar muertes o lesiones graves entre los usuarios de las vías”.
En la instancia, las autoridades también precisaron que conducir un vehículo motorizado sin permiso de circulación, SOAP, Placa Patente Única, y/o revisión técnica o certificado de homologación, contempla una infracción grave que va entre 1 y 1,5 UTM, es decir, entre $52.000 y $78.000, aproximadamente. En tanto, circular sin licencia de conducir es considerado una infracción gravísima, lo que conlleva la suspensión del documento o su imposibilidad de obtenerla entre 5 y 45 días, y una sanción de 1,5 a 3 UTM (entre $78.000 y $156.000 aproximadamente).
En el único caso en que no se justifica el retiro del vehículo, es cuando la persona no porta la Revisión Técnica o el certificado de homologación.
Cabe recordar que desde diciembre pasado rige el nuevo examen para la obtención de la licencia clase C, que considera una prueba práctica mediante un circuito cerrado estandarizado para evaluar las habilidades del conductor.