Con gran alegría y emoción los niños y niñas que viven a lo largo del trayecto que recorre el ramal Talca – Constitución esperaron la visita adelantada del Viejito Pascuero, quien llegó con regalos y dulces.
La actividad, organizada desde hace más de 30 años por la Universidad de Talca, tuvo como punto de inicio la Estación de Ferrocarriles de Talca, hasta donde llegaron autoridades y académicos que se sumaron entusiastas a participar de esta hermosa experiencia de vinculación con las familias del Maule profundo.
El recorrido comenzó en la estación de Corinto, donde el Tren era esperado con entusiasmo por gran número de niños, niñas y sus familias, además de representantes de la comunidad, como Miriam Rojas, de la Junta de Vecinos que año a año organiza la recepción del transporte navideño.
“Desde hace 30 años que acá llegan todos los niños a esperarlo, siempre tenemos algo preparado con cariño para recibirlos. Es muy lindo, precioso, porque los niños se levantan temprano para venir a recibir su regalito. Estamos muy agradecidos, muchas gracias a la Universidad de Talca”, comentó Miriam.
También de Corinto, Juanita González llevó por primera vez a sus nietos a esperar el ferrocarril. “Me parece muy bonito. Siempre mis hijas me contaban de esta actividad y ahora vine y traje a mis nietos. Muy agradecida con quienes lo organizan, por los niños que están felices con sus regalos. Así que muy contenta”, expresó.
Otra de las estaciones emblemáticas del recorrido del Tren es González Bastías. Allí esperaba como siempre la comunidad, encabezada por la Junta de Vecinos de dicha localidad. Su presidenta, Marianela Sepúlveda, recibe a la comitiva navideña desde los inicios de la iniciativa utalina. “Para nosotros esto es una dicha, una alegría. Nos preparamos porque queremos mostrar lo nuestro, como nuestras tortillas de rescoldo de harina rubia que las hacemos para recibir el Tren. Lo hacemos con mucho cariño, la verdad es que a me emociona cada vez que lo recibimos, es una alegría, una tradición”, comentó.
Una tradición que mantienen las familias que aún habitan en González Bastías, como José Luis Zúñiga Díaz, quien ahora lleva a su hijo Cristóbal a recibir los regalos del Tren de Navidad. “Cuando yo era niño mi papá era ferroviario y trabajaba acá, y como no teníamos conectividad con la ciudad, nos traía la alegría de ahora, no teníamos acceso a regalos, a nada, entonces este Viejo Pascuero era el que nos traía los regalos. Ahora traigo a mi hijo, es una tradición que ojalá perdure y poder traer a los nietos, eso es lo bonito”, indicó.
La directora de Extensión de la Universidad de Talca, Marcela Albornoz Dachelet, relevó que a través de esta actividad “se integra también a la comunidad del Maule a este Maule profundo, con este ramal de Talca – Constitución, visitando cada uno de los lugares y entregándole una sonrisa a los niños y niñas”.
“Nos sentimos tremendamente orgullosos de que cada año podamos desarrollar esta hermosa actividad, estamos haciendo este nuevo año un gran trabajo de mediación y vinculación con el medio, de extensión, lo que nos llena de orgullo”, agregó.
Por su parte, la directora del Centro Tecnológico Kipus de la misma Institución, María Luisa del Campo, destacó que “es una maravillosa experiencia poder ver todo lo que se genera en torno a la comunidad, esta vinculación bidireccional, que en el fondo no es solamente que nosotros vengamos a entregar, sino que también es mucho lo que lo que la misma comunidad nos está entregando con cada sonrisa que se nos da, con cada gesto pequeñito. Muy agradecida por la experiencia”.
Como es tradición, el Coro de Niños de nuestra Casa de Estudios, dirigido por la profesora María Cecilia Sepúlveda, acompaña la iniciativa, regalando en cada estación la interpretación de villancicos y canciones navideñas.
En esta oportunidad, una de las integrantes de la agrupación y estudiante utalina, Emilia Carrasco, comentó que “es muy bonito porque yo volví a hacer esta actividad, antes participaba cuando era chiquitita. Después ingresé a la Universidad y ahora estoy estudiando. La verdad es que siempre me ha gustado la navidad, los villancicos, la música y poder tenerles este momento a los niños que tanto esperan, que creo que lo esperan todo el año, es una gran satisfacción cooperar con esa felicidad y mantener la magia de la Navidad”.
Con el propósito de que nadie quede sin regalo el Tren se detuvo en cada lugar donde hubiera niños, incluso en puntos que no son paradas habituales.
Los juguetes que se entregan a lo largo del trayecto son donados por la comunidad, personas y empresas, y son recopilados a través de una campaña que organiza la Dirección de Extensión Cultural de la UTalca.
“Quiero destacar la generosidad de la comunidad universitaria, de la ciudadanía, porque tenemos también importantes donaciones que nos permite entregarle a los niños y niñas un juguete digno, nuevo, un juguete bonito para que puedan celebrar la Navidad”, manifestó Marcela Albornoz.
Al término del recorrido, en Constitución, el Viejito Pascuero regaló además un lindo mensaje. “Los niños y niñas se han portado muy bien, muy ordenados. El Tren es una maravilla, Dios quiera que se mantenga por muchos años para que yo pueda viajar en él para llegar todos los años. Feliz Navidad para todos”.