En las cuatro cabeceras provinciales de la Región del Maule y con más de 50 asistentes de distintas agrupaciones de la sociedad civil, la seremi de la Mujer, Claudia Morales Courtin, lideró y encabezó los diálogos participativos sobre el impacto de la Convención Belem do Pará y los desafíos en materia de erradicación de la violencia contra la mujer.
Esta convención se realizó el 9 de junio de 1944 en la ciudad de Belém do Pará, Brasil, y constituye un tratado interamericano pionero en formalizar la definición de la violencia contra las mujeres como una violencia de sus derechos humanos.
La Convención de Belém do Pará estableció por primera vez el derecho de las mujeres a vivir una vida libre de violencia, así como también, el desarrollo de mecanismos de protección y defensa de los derechos de las mujeres, en la lucha para eliminar la violencia contra su integridad física, sexual y psicológica, tanto en el ámbito público como en el privado.
La seremi de la Mujer de la Región del Maule, Claudia Morales Courtin, explicó que “la ministra Antonia Orellana nos ha instruido recabar información de la ciudadanía y de organizaciones de la sociedad civil que trabajan en prevención y abordaje de la violencia de género sobre cómo hemos avanzado, pero principalmente, sobre cómo fortalecer la prevención, sobre todo en espacios escolares, con el objetivo de contar con más información para el encuentro internacional que se realizará en junio en nuestro país. Ha sido un encuentro fructífero que nos ha permitido proponernos nuevos desafíos como región”.
Cabe destacar que Chile asumió la Presidencia del encuentro el 20 de septiembre 2023, la cual se extenderá por dos años más y que este próximo 10 de junio se realizará la Conferencia de Estados Parte (CEP) 2024 en la ciudad de Santiago.
¿Qué está promoviendo Chile en su Presidencia de la Conferencia de Estados Parte?
1. Fortalecer el órgano político que posibilite una mayor interacción de los Estados Parte con el mecanismo y fomente un mayor compromiso, tanto financiero como técnico, a la hora de implementar las disposiciones de la Convención de Belém do Pará.
2. Favorecer la adopción de un plan de trabajo del Mecanismo que apunte a la implementación de estrategias aceleradoras, con énfasis en prevención de la trata de personas y crimen organizado.
3. Optimizar la articulación entre el MESECVI y la CIM para un mejor funcionamiento interinstitucional e intergubernamental.