El Seremi de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación de las regiones de O’Higgins y Maule, Hernán Astaburuaga Inostroza, realizó una visita a la sede de la Universidad de Talca en Los Niches, Curicó.
La actividad, organizada por invitación de esta casa de estudios, tuvo como objetivo conocer las capacidades tecnológicas de sus laboratorios y explorar oportunidades de colaboración estratégica con su comunidad académica.
Durante su recorrido, el seremi visitó el Laboratorio de Aplicaciones en Redes Inteligentes, (LARI) a cargo del académico Carlos Restrepo quien lidera investigaciones pioneras sobre hidrógeno verde y su aplicación en electro movilidad. También visitó el FABLAB, liderado por los académicos Daniel Díaz y Felipe González, este laboratorio tiene como objetivo fomentar la innovación y el desarrollo de prototipos mediante tecnologías de fabricación digital como impresión 3D, corte láser y mecanización.
A la vez que promueven el acceso a herramientas tecnológicas avanzadas y espacios colaborativos, para apoyar emprendimientos y pequeños negocios en la región del Maule.
Además, el Seremi, Hernán Astaburuaga sostuvo una reunión con destacados académicos de la universidad, entre ellos Claudio Tenreiro, físico nuclear, que ha trabajado en temas energéticos, especialmente en la seguridad nuclear y la energía renovable, Caddy Cortés, astrónoma, quien enfoca sus investigaciones en el estudio de exoplanetas y estrellas variables en cúmulos globulares, además de liderar proyectos que buscan visibilizar la participación femenina en áreas STEM y Fernando Cortés, académico y astrónomo, magister en ciencia, y contó con la participación de Rodrigo Vergara quién es gestor de proyectos y líder de Ingeniería 2030. Este encuentro permitió analizar iniciativas conjuntas que buscan fortalecer el desarrollo regional a través de la ciencia, la tecnología, el conocimiento y la innovación.
“Este tipo de instancias son fundamentales para alinear los esfuerzos entre la academia y el sector público, permitiendo identificar y potenciar las capacidades tecnológicas y de innovación que existen en nuestras universidades. A través de la colaboración, podemos generar soluciones prácticas y efectivas que, no solo impulsan el desarrollo científico y tecnológico, sino que también tienen un impacto directo en la mejora de la calidad de vida de nuestras comunidades. Es importante seguir promoviendo este tipo de alianzas estratégicas, que permiten que el conocimiento generado en la academia se traduzca en soluciones concretas para los desafíos que enfrentamos en la región y el país.”