En el marco del convenio vigente entre Santo Tomás y el Hospital Regional de Talca, se dio inicio a un ciclo de cursos orientados a las jefaturas de unidades hospitalarias a nivel administrativo, de gestión y también del área clínica.
Cabe mencionar que el diseño, organización y ejecución de estos programas está a cargo de la Dirección de Capacitación y Educación Continua de la casa de estudios superiores.
Se trata de cursos denominados Liderazgo y Habilidades Directivas para la Gestión Pública; y Derecho a la Protección de Salud y Responsabilidad Legal Sanitaria. En este contexto, uno de los módulos, denominado Gestión Estratégica de Salud, fue dictado por el ex Superintendente de Salud, Manuel Inostroza.
Inostroza es médico de la Universidad de Chile, Máster de Salud Pública con mención en Financiamiento y Gestión de la Universidad Johns Hopkins; ha destacado como gerente público en la Superintendencia de Salud, en la Superintendencia de Isapres, fue Director del Centro de Referencia de Salud Peñalolén Cordillera Oriente y Secretario Regional Ministerial de Planificación de la Región Metropolitana.
Se ha desempeñado como Decano de la Facultad de Medicina y Ciencia de la Universidad San Sebastián; Director de Campos Clínicos; Director del Magister de Salud Pública, Presidente del Consejo Académico y Consultor del Instituto de Salud Pública de la Universidad Andrés Bello; fue Consejero Nacional del Sistema de Alta Dirección Pública del Estado y además, como experto en temas de gestión y salud pública, se desempeñó como Asesor del Ministerio Secretaría General de la Presidencia en la División de Modernización del Estado y como Jefe de Gabinete de los Ministros de Salud, Carlos Massad y Alex Figueroa, siendo también, consultor de la Organización Panamericana de la Salud en Washington DC.
¿Cuáles fueron los lineamientos de lo expuesto en el inicio de este curso?
“Lo que uno ha aprendido por experiencia y por buenas prácticas es que la gestión estratégica en el sector salud es fundamental. Hoy día la gestión estratégica es clave para enfrentar situaciones como epidemias y catástrofes que son cada vez más frecuentes en la realidad nacional, los desafíos de la transformación digital, hay una nueva era en este aspecto que incluso está reformulando el contrato social. Por cierto, los contextos de presiones sociales, políticas, migratorias, que hacen cada vez más compleja la gestión de las instituciones de salud y en este caso en particular aplicado al Hospital Regional de Talca. Recordemos que este es un hospital que tiene una tradición compleja de relación con su comunidad, y el tema del pensamiento estratégico es fundamental para que se arme un equipo directivo que pueda enfrentar estos desafíos y reorientar el rumbo para transformar a este hospital en uno de los mejores al servicio de su población”.
¿A su juicio, en qué nivel se encuentra la Salud Pública en nuestro país?
“Siempre he dicho que la salud pública chilena resulta bien paradojal porque por un lado tiene indicadores que la posicionan dentro de la comparación en América Latina probablemente dentro de los dos o tres mejore sistemas de salud, sin embargo, la percepción de satisfacción usuaria es bastante más baja que eso y la gente en el sector público se queja con razón por las listas de espera y el mal trato; y en el sector privado por los altos costos que no está dispuesto a pagar y por lo tanto, se judicializa. Más allá del desafío técnico de mantener y mejorar algunos resultados, tenemos que hacernos cargo de esa sensación de insatisfacción que tiene actualmente la población tanto en la dimensión pública como privada”.
¿Qué pueden esperar los directivos del HRT que participan de estos cursos impulsados por Santo Tomás?
“Lo que yo quiero es ayudarles a reflexionar el músculo estratégico de su pensamiento, a que se pongan en todos los escenarios, y que estén junto a los otros profesores del curso, dispuestos a desarrollar los planes operacionales de gestión de calidad y que precisamente se hagan cargo de estos problemas que hoy día enfrenta el sistema de salud chileno y por eso es que el pensamiento estratégico puede ayudar a que este hospital sea de verdad uno de los mejores hospitales del país”.
¿Cuál es el impacto que podría recibir la comunidad después de la capacitación de estos profesionales del HRT?
“Un hospital que tiene pensamiento estratégico no vive de la coyuntura, sino que está mirando siempre dos o tres pasos más adelante, cuál es la nueva tecnología, cuáles son los métodos de sanación y curación de la población, cuáles son las nuevas dinámicas de recursos humanos que se requieren, y eso por lo tanto puede garantizar que el hospital más allá de vivir de coyunturas y problemas, que sin duda los hay, tenga un equipo directivo que está pensando en el bienestar de la población a 10 o 20 años plazo”.