Suben los termómetros, y por ende, nuestras mascotas pasan más tiempo al aire libre, siendo un objetivo fácil para pulgas y garrapatas. Si bien la desparasitación interna debe tratarse cada 3 meses, la externa es un problema recurrente en esta época del año, y no hay que despreocuparse.
Axel Haleby, Médico Veterinario y Gerente General de Inaba Chile, explica que “lamentablemente pulgas y garrapatas son parte de muchos entornos, y la única acción efectiva que una persona puede tomar es la desparasitación de su mascota. En general, existen operativos sin costo o asociados a municipalidades. Lo importante es hacerlo a tiempo y que se trate de una experiencia no estresante para nuestros perros y gatos”.
Se trata de parásitos distintos. Las pulgas pueden saltar desde un animal a otro incluso si se encuentran a pocos metros y no existe contacto físico, mientras que las garrapatas se encuentran en el entorno, y se adhieren al perro o gato cuando éste transita por el parque y toca un arbusto o maleza, que el arácnido utiliza como plataforma para lograr su objetivo.
A continuación, Inaba preparó varias recomendaciones que cualquier tutor de perro o gato debería poner en práctica:
- Uso de desparasitantes: Si bien existen alternativas de uso doméstico, lo más importante siempre es consultar con el veterinario, o asistir a jornadas de desparasitación comunales que estén debidamente autorizadas. Cualquiera sea el caso, debe ser un procedimiento sin estrés para el perro o gato, y existen alternativas para lograrlo. Una de ellas son los reconocidos snacks saludables y húmedos Churu, que divierten y distraen a la mascota, con sabores y presentaciones especialmente preparadas para cada especie y edad.
- Revisar periódicamente su pelaje: Si bien los desparasitantes suelen ser efectivos, no hay que descuidar la revisión regular del pelaje del perro o gato, y alertar cualquier anomalía. La inspección visual es la forma más eficaz de detectar la presencia de garrapatas y pulgas.
- Atención con los síntomas: Que un perro o gato se rasque es normal y puede obedecer a los más diversos motivos, desde estar más cómodos hasta la existencia de alergias. Pero no hay que descartar la presencia de parásitos, especialmente cuando lo hacen con más regularidad que la habitual, y en zonas específicas del cuerpo.
- Cuidar el jardín: Puede parecer extraño, pero la única forma de minimizar el riesgo, de forma complementaria a la desparasitación es, o evitando exponer a la mascota a lugares con pasto largo, excesiva maleza o escombros -que son los lugares favoritos de pulgas y garrapatas para esconderse- o bien mantener el patio hogareño en condiciones aptas que eviten la proliferación de estos agentes. Si los perros y gatos son inquietos y les encanta explorar lugares de riesgo, una forma de distraerlos es mediante juegos que incluyan snacks saludables, y así pasen más tiempo en lugares seguros.
- Tenencia responsable: Aunque suene majadero. El mayor riesgo de que un perro o gato sea víctima de parásitos externos es con salidas o escapadas sin tutor, ya que pueden deambular por lugares sin control y sin las condiciones sanitarias adecuadas para su bienestar. Es responsabilidad de las personas velar por lo anterior.
“Más allá de un tema trivial, no hay que olvidar que pulgas y garrapatas pueden generar algo más que incomodidad, como lesiones en la piel, además de ser vectores de otras enfermedades y producir pérdida de apetito, letargo, fiebre, entre otros síntomas. Por ende, es muy importante la prevención”, finaliza el ejecutivo de Inaba Chile.







