La Escuela San Miguel realizó la ceremonia de licenciatura y egreso del octavo básico 2025. Con los 30 egresados estaban sus padres, familiares y apoderados, acompañados del cuerpo docente y asistentes de la educación.
El acto, realizado en un salón de la UCM, fue presidido por la directora Ana María Arriola, al que asistió, Jaime Lavín Donoso, Jefe de la Unidad Control de Gestión del DAEM de Talca. Por la Fundación Roberto Hernández Cornejo, estuvieron Carmina Zorrilla Sazo y Horacio Hernández Anguita, respectivamente secretaria y presidente del directorio.
El acto transcurrió en tono emotivo y contó con bellas expresiones artísticas musicales. El discurso de la directora Arriola marcó el rumbo esperanzador hacia el futuro de los estudiantes; el profesor jefe, Jorge Vergara, alentó con cariño a los graduados; y la estudiante María Esperanza Cabrera Peña, habló a nombre del curso, haciendo cálidos recuerdos. Al culminar, se les hizo la entrega de sus certificados de estudios a las alumnas y alumnos del establecimiento, junto a otros reconocimientos del centro educativo.
En la ocasión, la Fundación Roberto Hernández Cornejo, por cuarta vez, entregó de manos de Horacio Hernández, el premio Roberto Hernández Cornejo a María Esperanza Cabrera Peña, debido a sus virtudes de empeño, estudio y espíritu de servicio, que fueron también las de quien es una personalidad destacada de las letras nacionales, periodista, historiador y bibliófilo, miembro de la Real Academia de la Historia y de la Academia Chilena de la Lengua. Hernández Cornejo fue un escritor autodidacta, que se forjó a sí mismo, nació en 1877 en Melipilla y falleció en Valparaíso, en 1966, dejando un gran legado cultural al país.
Horacio Hernández expresó a María Esperanza: “María Esperanza: no ocurre nada en la educación si no ocurre en ti, que eres la protagonista, si es que tú no te haces cargo de ti misma. Si es que cada uno no toma conciencia de que tengo que forjar mi destino… Me darán pautas, me abrirán horizontes, me suscitarán inquietudes, pero si no están en mí, no acontece nada. ¡Tengo que agarrar mi vida en mis manos y forjarla poco a poco! Esa es la experiencia de Roberto Hernández Cornejo, hombre sencillo, de un pueblo entonces alejado de Santiago, Melipilla. Él se forja a sí mismo porque es un autodidacta, porque no tuvo la oportunidad de una escuela. Esa forja de su carácter, su disposición a investigar, a crecer, lo hizo en forma tenaz, constante, a tal punto de que se convirtió en uno de los grandes escritores de Chile, en un gran historiador, en un hombre que ahora es estudiado y conservado en tres universidades del país”.
El premio “Roberto Hernández Cornejo”, como reconocimiento y estímulo de la Fundación que lleva su nombre, se otorga desde 2016 a estudiantes que egresan del ciclo básico o medio, de 4 establecimientos educacionales públicos y consiste en un diploma, una pequeña colección de libros y un estímulo en dinero.
En la misma ceremonia y a nombre de la Fundación RHC, Horacio Hernández junto a Carmina Zorrilla, hicieron el obsequio para la biblioteca de la Escuela San Miguel, de una imagen enmarcada de Roberto Hernández, que fue bibliotecario y director de la primera biblioteca pública del país. La directora Ana María Arriola recibió agradecida la imagen del escritor para la biblioteca de la Escuela San Miguel de Talca, la que recordará a los estudiantes una figura destacada de las letras nacionales.






