Chile avanza hacia un nuevo modelo financiero centrado en las personas. Con la publicación del anexo N.º 3 por parte de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) el organismo que regula bancos, seguros y el sistema financiero en general, se habilita el funcionamiento del llamado sistema de finanzas abiertas (Open Finance).
Este sistema, regulado por la Ley Fintec (Ley N.º 21.521), permite que los usuarios puedan autorizar de forma segura que otras instituciones como aseguradoras, fintechs o nuevas plataformas financieras accedan a su información bancaria (saldos, productos contratados o historial de pagos), con el fin de ofrecerles productos más baratos, personalizad y fáciles de comparar.
“La Ley Fintec representa un cambio de paradigma: ya no son las entidades financieras quienes controlan la información, sino que el usuario es quien decide con quién compartirla y para qué”, explica Juan Manuel Jiménez, responsable de Open Finance para la Región Andina y Cono Sur de Minsait, compañía de Indra Group.
¿Qué es el anexo N.º 3 y por qué es clave?
El anexo N.°3 es una norma técnica publicada por la CMF que define los requisitos mínimos para que este nuevo ecosistema funcione bien, sea seguro y confiable. Establece, por ejemplo:
- Cómo se deben diseñar las APIs (interfaces que permiten que distintas plataformas y bancos “hablen entre sí”).
- Qué protocolos deben usar para proteger la información de los usuarios.
- Qué mecanismos se usarán para respaldar el sistema si ocurre una caída.
- Cómo se verificará que el usuario otorgó realmente su consentimiento para compartir sus datos.
Este último paso es clave para que todas las instituciones financieras, grandes y pequeñas, operen bajo las mismas reglas y puedan conectarse entre sí. La implementación será gradual, y se extenderá hasta 2029.
Chile se suma a una tendencia global
Modelos como el Open Finance ya existen en países como Brasil o Reino Unido, y han demostrado beneficios concretos: mayor competencia, productos más personalizados y más acceso a servicios para personas tradicionalmente excluidas.
Chile cuenta con una ventaja: tiene una ley clara, un regulador activo y un ecosistema tecnológico preparado. Minsait, además de proveer tecnología, aporta su experiencia internacional y su visión en el diseño de estándares que hoy son parte del anexo N.° 3.
¿Qué viene ahora?
Durante los próximos meses se sumarán más instituciones al sistema, se integrarán nuevas funcionalidades, y se pondrá en marcha el Directorio de Participantes, que permitirá autenticar a quienes operen dentro del sistema de finanzas abiertas.
El proceso se verá fortalecido por otras normativas que vienen en camino, como la nueva Ley de Protección de Datos Personales (2026) y la Ley Marco de Ciberseguridad (2025).
Con esta base legal, técnica y operativa, Chile se proyecta como un referente regional en innovación financiera, con soluciones tecnológicas como OpenMinsait, que permiten cumplir con la normativa sin renunciar a la eficiencia, la seguridad y la experiencia del cliente.
La importancia de un plan de implementación óptimo
Desde Minsait se realiza un acompañamiento a las instituciones en todo el proceso de adopción del modelo de finanzas abiertas, comenzando por un asesoramiento inicial que permite entender en profundidad el impacto regulatorio y tecnológico en sus sistemas, procesos y modelo operativo. “También se ofrece una colaboración en el diseño de la estrategia de posicionamiento competitivo, ayudando a indentificar casos de uso concretos que maximicen las oportunidades de monetización en el nuevo ecosistema”, agrega Francisco Gamboa, sénior mánager del mercado de Servicios Financieros de Minsait en Chile.
Lo anterior se respalda en un conocimiento profundo del sector, gracias a la experiencia de más de 8 años con clientes en Europa y Brasil que Minsait tiene, y al actual rol en el diseño de herramientas clave para el sistema de finanzas abiertas en conjunto con la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) de Chile.
Un proceso de implementación en diferentes formatos
En la fase de implementación, es clave una propuesta flexible que se adapte a la estrategia definida por cada entidad. Apoyar a los clientes tanto en desarrollos internos a medida —incluyendo la selección e integración de nuevos componentes y la implementación de las capas de seguridad necesarias— como a través de la plataforma OpenMinsait en formato software as a service (SaaS), que permite externalizar por completo la relación y conexión con terceros. Esta solución garantiza el cumplimiento normativo, la trazabilidad del consentimiento y la continuidad operativa, sin que la entidad deba asumir la complejidad técnica ni invertir en infraestructura propia.
Como parte de esta propuesta, OpenMinsait se presenta como una solución tecnológica integral, por un lado, permite cumplir con todos los requisitos normativos establecidos en el anexo N.º 3, gestionar de forma clara y trazable el consentimiento de los usuarios, integrándose con los sistemas internos de bancos, cajas, cooperativas o aseguradoras. Adicionalmente, incorpora funcionalidades en la vertiente de monetización, como los motores iniciación de pagos, agregación y categorización de información, habilitando el acceso a los procesos de finanzas abiertas desde el inicio, poniendo foco en el desarrollo de casos de uso que permitan generar ingresos y mitigar los esfuerzos de cumplimiento regulatorio.
Minsait de esta forma se transforma en un partner funcional para abordar la implementación del Open Finance, dado que aporta eficiencia a la hora de establecer los procesos y sistemas para cumplir con la regulación y añade una visión de negocio y soluciones con amplia experiencia internacional, implementando casos de uso que permiten obtener ingresos y eficientar procesos a partir de las oportunidades que se abren.