Cada segundo jueves de octubre desde el año 2000 se conmemora el Día Mundial de la Visión, fecha decretada por Organización Mundial de la Salud (OMS) conjuntamente con el Organismo Internacional de Prevención de la Ceguera (IAPB) cuyo objetivo es concientizar acerca de los diferentes tipos de afecciones visuales, sus tratamientos y la prevención de la ceguera.
En nuestro país, de acuerdo a la Sociedad Chilena de Oftalmología (Sochiof), hay alrededor de 100.000 personas que padecen ceguera y cerca de un millón 200 mil que presentan algún grado de déficit visual.
De acuerdo con datos de la base pública de Fonasa y a antecedentes de la red de clínicas Ultravisión -que cuenta con presencia en distintas ciudades de Chile desde hace 30 años-, entre 2020 y lo que va a la fecha de 2023 ha aumentado progresivamente la cantidad de personas -de todas las edades- en Chile que presenta problemas de refracción. Y es la miopía principalmente la que ha ido al alza y la demanda por lentes y por cirugías oftalmológicas correctivas también ha aumentado.
Según los especialistas de esta red de clínicas, Ultravisión busca promover durante este Mes de la salud visual que en Chile se ha mejorado el acceso a tratamientos de enfermedades de la visión, pero que sigue siendo necesario actualizar la cobertura y además que distintos organismos públicos y privados, fundaciones, clínicas, promuevan campañas educativas durante todo el año.
Se estima que el 70% de la población tiene problemas visuales refractivos, de los cuales solo el 35% de ellos está debidamente diagnosticado (astigmatismo, miopía, hipermetropía). Esta data de Ultravisión concuerda con antecedentes entregados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2021 los cuales se referían a información de países de distintos continentes en similar situación.
Según cifras de Ultravisión, durante 2022 la mayor demanda por cirugías oftalmológicas se presentó en el tramo etáreo de 27 a 55 años siendo la mayoría personas Fonasa quienes a través del Bono PAD pudieron cubrir un 50% del valor de la cirugía. Los pacientes Isapre en tanto, dependiendo de su plan, pudieron acceder al beneficio de copago 0 para la intervención láser.
Las afecciones más demandadas en tanto fueron: miopía + astigmatismo: 40.48%, hipermetropía + astigmatismo: 22,62%, miopía: 17.86%,astigmatismo: 17.86% e hipermetropía: 9.52%.
En cuanto al aumento de la miopía y el astigmatismo, desde Ultravisión explican que el exceso de uso de pantallas durante la pandemia, sumado a la menor exposición a la luz solar, provocaron que aumentaran las cifras.
Y recalcan que lo recomendable, tanto para niños en edad escolar como para adultos, es no estar todo el día conectados a las pantallas e intentar durante espacios de 20 minutos durante el día mirar lugares alejados. Así se ejercita el ojo para mirar tanto de cerca como de lejos, previniendo un problema posterior.
El especialista entrega las siguientes recomendaciones para mantener los ojos sanos a todas las edades:
– La importancia de la detección precoz:
Desde niños, recibir un examen oftalmológico es parte importante para mantenerse saludable. Más aun, con el transcurso del tiempo, el ojo va experimentando naturalmente modificaciones en su estructura y función, y además existen enfermedades visuales que se desarrollan con el paso del tiempo. Dado que algunas enfermedades oculares —como las cataratas, la maculopatía, el glaucoma y la retinopatía diabética— son más frecuentes con el paso de los años, la detección precoz constituye el mejor sistema de prevención primaria.
– Somos y vemos lo que comemos:
Colabora con nuestra salud visual el llevar una dieta equilibrada (incluyendo frutas cítricas, aceites vegetales, frutos secos, granos, vegetales de hoja verde y pescados), realizar ejercicio de manera regular y evitar el tabaquismo, todo lo cual, además, colabora en la prevención de otras enfermedades. El correcto control de enfermedades crónicas, como hipertensión o diabetes, también serán de gran importancia en este sentido.
– Estrategias prácticas para el cuidado de nuestros ojos:
A la hora de leer, evitemos forzar la vista evitando una mala iluminación o cambios bruscos de luz. También debemos establecer un balance entre la iluminación difusa (ambiente) y la localizada, dirigida hacia el texto y no hacia la cara de la persona.
– El computador y el celular:
Quienes están muchas horas fijando la vista disminuyen su frecuencia de parpadeo. Procure tener la pantalla, al menos, a 45 cm de distancia. Intente hacer pausas y observar puntos distantes cada 30 minutos, cerrar los ojos durante algunos segundos para mantener reposo visual y usar los anteojos apropiados. La pantalla debe estar debajo del horizonte visual. Esto permite que los párpados cubran mayor superficie del globo ocular y disminuya la exposición de la córnea. Así será menor la desecación de la película lagrimal que cubre la córnea y protege de los síntomas del ojo seco.
– Viene el verano, ¿anteojos de sol?
Con el paso del tiempo el pigmento disminuye y los ojos están más indefensos ante la luz. Al igual que en la piel, las radiaciones se acumulan, por lo que utilizar anteojos de sol con filtro ultravioleta en las horas de mayor radiación solar es la mejor prevención.