En cada celebración de Año Nuevo, los fuegos artificiales han sido el protagonista de las 00.00 horas, sin embargo, este año se ha cambiado el paradigma priorizando otros factores, ya que, en consideración a la diversidad de la comunidad y con el objetivo de promover un ambiente respetuoso y seguro para todos, el municipio ha tomado la decisión de no realizar lanzamientos de fuegos artificiales en estas fiestas festivas.
El alcalde Juan Carlos Díaz, sostuvo que “desde la pandemia lo suspendimos y nos dimos cuenta que afectaba bastante a nuestras mascotas y a un grupo importante de vecinos y vecinas con distintas dificultades. Creemos necesario mantener esta decisión de no tener juegos pirotécnicos y celebrar de otra manera más respetuosa con estas personas y mascotas”.
Esta medida, busca salvaguardar el bienestar de personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA), adultos mayores y nuestras queridas mascotas, quienes pueden experimentar niveles de estrés y ansiedad debido al ruido y las luces asociadas con los fuegos artificiales.
Al optar por celebraciones más silenciosas y respetuosas, se espera contribuir a un ambiente inclusivo que refleje los valores de empatía y solidaridad, creando un entorno acogedor donde cada individuo se sienta valorado y respetado, disfrutando de manera tranquila y en armonía.