Ocurrió de modo sencillo y solemne en la hermosa y fina sala Ercilla de la Biblioteca Nacional. Soledad Abarca, su directora, fue cálida al acoger a los congregados que asistieron a la presentación y entrega del libro “El tintero prodigioso de don Roberto. Vida, obra y legado bibliográfico de Roberto Hernández Cornejo”.
El volumen, de 308 páginas, editado e impreso en Arica, es el resultado de un trabajo entre la Universidad de Tarapacá (UTA) y la Fundación Roberto Hernández Cornejo.
La obra reúne a seis autores especialistas en sus áreas, procedentes de Arica, Iquique, Santiago y Talca, lo que le otorga un carácter verdaderamente nacional a la investigación.
Ahora, el libro llegó a la Biblioteca Nacional, al recinto inspirador y convocante de la cultura del país. En ese marco, el público permaneció atento, escuchó y participó con interés. Los expositores compartieron reflexiones, perspectivas e impresiones de la obra.
En la mesa principal con un fondo de madera, estaban el historiador Misael Camus Ibacache, Director General de Docencia de Postgrado de la UTA, Soledad Abarca de la Fuente, Directora de la Biblioteca Nacional, Jaime Rosenblit Berdichevsky, Director del Centro de Investigaciones Diego Barros Arana, Horacio Hernández Anguita, Presidente de la Fundación Roberto Hernández y Gonzalo Serrano del Pozo, historiador, académico de la Universidad Adolfo Ibáñez y miembro del directorio de la Fundación.
Roberto Hernández Cornejo, nacido en Melipilla, desarrolló gran parte de su fecunda labor cultural en Valparaíso, donde se consolidó como periodista, historiador y coleccionista de libros. Una parte muy importante de su legado, es preservado por la Universidad de Tarapacá. Por eso, junto a la Fundación RHC se plasma esta edición que reúne materiales únicos y valiosos para la investigación futura. Los autores del ejemplar son: por la UTA, el profesor y académico, Sergio González Miranda, Premio Nacional de Historia 2014; Lorena Jopia Gómez, conservadora restauradora, a cargo de la colección Hernández en la Biblioteca de la UTA y Rodrigo Ruz Zagal, académico y profesor Historia de la misma universidad; en cambio, por la Fundación, escribieron: el académico Gonzalo Serrano del Pozo, el periodista Daniel Meza Hernández y Horacio Hernández Anguita; este último, además, con el profesor González, fueron los editores del libro.
He aquí las siguientes pinceladas e impresiones de los participantes en la mesa:
Misael Camus, representante del rector Emilio Rodríguez de UTA, hizo ver algunos hallazgos bibliográficos curiosos, que dan cuenta de las características particulares de la colección Hernández, pues revelan los intereses de quien formara esa biblioteca, la que actualmente se preserva en el Sistema de Biblioteca de la Universidad de Tarapacá en Arica. “La obra patrimonial, bibliográfica y archivística de don Roberto, dijo, es una fuente inagotable y compleja de una “fuente primaria” para adentrase a historiar desde la primera mitad del siglo XX”.
Por su parte, Jaime Rosenblit, detalló las fuentes bibliográficas y documentales que utilizó Roberto Hernández para escribir “El Salitre” y luego contextualizó esta obra en la globalidad de su trayectoria intelectual. A propósito, comentó: “Me parece que se trata de ubicar al personaje en su propia historicidad y las intenciones que subyacen en su obra. Entonces, el salitre es un botón de muestra, que se entiende confrontándolo con otras obras suyas importantes”, sentenció.
Gonzalo Serrano, académico de la Universidad Adolfo Ibáñez, historiador y periodista, señaló: “El día de la presentación del libro, 10 de diciembre, coincidió con los 80 años del Nobel de Gabriela Mistral. Esto fue muy significativo porque al igual que Roberto Hernández fueron ambos autodidactas. Dos personas que lograron crecer y desarrollarse en un Chile nuevo que había recibido los beneficios del salitre luego de la Guerra del Pacífico. Presentar el libro, además, en la Biblioteca Nacional, al lado de la sala Medina, también fue simbólico. José Toribio Medina y Roberto Hernández fueron personas preocupadas del desarrollo cultural del país y dedicaron su vida a ello”.
En la testera: Misael Camus, Soledad Abarca, Jaime Rosenblit, Horacio Hernández y Gonzalo Serrano
Fue Soledad Abarca quien destacó la importancia de la “misión institucional” del aporte de la Universidad de Tarapacá en la “preservación de una colección bibliográfica y documental” como la de don Roberto Hernández. Asimismo, remarcó que la publicación significaba una contribución al patrimonio cultural del país. En este sentido, se manifestó muy agradecida de la Fundación Roberto Hernández Cornejo por las “confianzas” que han cultivado y tienen como fruto una publicación que entrega “nueva información a la investigación”.
Al concluir la ceremonia, Misael Camus, en representación de la Universidad de Tarapacá y Horacio Hernández, por la Fundación RHC, hicieron entrega del libro a Soledad Abarca, directora de la Biblioteca Nacional, como expresión de colaboración y trabajo común por el patrimonio bibliográfico.
Fue una presentación académica sobria en su ambiente, amigable en su desarrollo, focalizada en la persona de don Roberto y muy rica en sus proyecciones, la que concluyó con un refrigerio para compartir entre los participantes el momento vivido.
Foto: Misael Camus, Soledad Abarca, Jaime Rosenblit, Horacio Hernández y Gonzalo Serrano







