Respecto al año anterior, las tasas de participación y de ocupación volvieron a aumentar (aunque a un menor ritmo) y se situaron en 60,9% y 55,7%, creciendo 1,2 pp. y 0,7 pp., respectivamente. Por otro lado, la población fuera de la fuerza de trabajo disminuyó 2,2%.
En las mujeres, la tasa de desocupación se situó en 8,9%, aumentando 0,5 pp. en doce meses, en tanto que las tasas de participación y ocupación se situaron en 51,5% y 46,9%, avanzando 1,8 pp. y 1,4 pp., en cada caso. En los hombres, la tasa de desocupación fue de 8,2%, con un alza de 0,8 pp., mientras que la tasa de participación creció 0,6 pp. y la tasa de ocupación no presentó variación.
Alza de personas ocupadas
El alza de las personas ocupadas fue incidida tanto por las mujeres (4,1%) como por los hombres (0,9%).
Los sectores que contribuyeron al aumento fueron actividades de salud (13,2%), comercio (3,3%) y administración pública (8,2%), mientras que los sectores que presentaron los principales descensos fueron construcción (-5,9%), hogares como empleadores (-10,0%) y actividades inmobiliarias (-24,3%). Por categoría ocupacional incidieron positivamente las personas asalariadas formales (2,2%), asalariadas informales (7,3%) y trabajadoras por cuenta propia (1,2%)
Informalidad
La tasa de ocupación informal se ubicó en 27,2%, aumentando 0,1 pp. en doce meses. Las personas ocupadas informales crecieron 2,5%, incididas por las mujeres (5,4%) y los hombres (0,2%).
Estacionalidad
La tasa de desocupación ajustada estacionalmente (que elimina los efectos de los factores exógenos estacionales de naturaleza no económica que influyen en su comportamiento coyuntural) se situó en 8,4%, aumentando 0,1 pp. respecto al trimestre móvil anterior.