Incorporar ozono a los procesos de producción de berries puede mejorar la producción de estos frutos debido a su reconocida acción descontaminante. Esta fue la premisa en la que se basó el proyecto de innovación que ejecuta un equipo de investigadores del Instituto de Química y de la Facultad de Ingeniería, y que fue probado en varios huertos de la Región del Maule.
La iniciativa consiste en un sistema inteligente, que funciona con energía fotovoltaica para generar ozono. Posteriormente el gas es inyectado al agua de regadío y suelos de plantaciones de berries, permitiendo de esta forma la disminución de los contaminantes biológicos existentes.
El académico de la Universidad de Talca y director del proyecto, Diógenes Hernández, destacó los beneficios observados en el uso de este gas y los logros obtenidos. “Demostramos que aplicar una concentración de 1 miligramo por litro en agua elimina las plagas que atacan la planta en la zona aérea y en suelo. Entre ellas la Botritis, que se elimina en un 100%. También se eliminan del agua los coliformes fecales, como el Escherichia Coli, logrando en la planta un mejor follaje y enraizamiento”.
A nivel de suelo, el ozono mata además otros microorganismos como los nemátodos en un 60%, logrando con esto evitar el uso de agroquímicos en esas plantas. Este, de acuerdo al académico, es un aspecto fundamental para la agricultura del Maule y del país, que cuentan con una amplia factibilidad de utilizar esta tecnología debido a la calidad solar existente.
Junto con estos aspectos positivos del uso de ozono, el sistema utilizado logra una disminución importante en el consumo de agua para riego y el uso de plaguicidas, dos parámetros establecidos para una agricultura orgánica, un aumento en la producción de berries y una mejora en la estructura morfológica de la planta.
El proyecto denominado “Uso de ozono, para el tratamiento de aguas de regadío y suelos en berries” contó para su ejecución con el apoyo del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC) financiado por el Gobierno Regional del Maule.
Mercados
Los beneficiarios potenciales son agricultores tradicionales de berries, específicamente aquellos que producen arándanos, frambuesas y cerezas, además de propietarios de invernaderos o cooperativas que tengan riego tecnificado subterráneo (entre 30 a 40 cm. de profundidad).
“Encontramos resultados favorables con las aplicaciones que se realizaron, ya que posterior a esto no encontramos Botritis”, expresó Alejandra Zapata, supervisora campo Snack Berries donde se probó uno de los sistemas.
Otro mercado objetivo es el riego agrícola tecnificado subterráneo, que utilizan los agricultores para el cultivo de los berries. Su interés mayoritario existe entre la agricultura tradicional, los invernaderos, cultivos hidropónicos, agricultura ecológica y en agricultores tradicionales que buscan aguas y suelos descontaminados para tener la posibilidad de acceder a los mercados internacionales.