Mantener bien controlada los índices de glicemia es un desafío constante para quienes tienen diabetes, pues cada día implica una vigilancia ininterrumpida, decisiones a veces complejas en torno a la alimentación y la constante preocupación por el desarrollo de la enfermedad. Sin embargo, y pese al reto que conlleva el control de esta patología, un estudio posiciona a Chile como líder global en el manejo de la diabetes tipo 1.
Esto porque los usuarios chilenos del sistema automatizado de administración de insulina MiniMed™ 780G han alcanzado los mejores resultados clínicos a nivel mundial en el control de la diabetes tipo 1. Este hallazgo, que marca un precedente, surge de un análisis comparativo de datos recopilados entre más de 374 mil personas en 100 países.
Estos impresionantes resultados fueron presentados durante el reciente Congreso de la Sociedad Chilena de Endocrinología y Diabetes (SOCHED) por el Dr. Robert Vigersky, reconocido endocrinólogo del Hospital Walter Reed (EE. UU.) y Chief Medical Officer de Medtronic. El Dr. Vigersky expuso los hallazgos de esta vasta base de datos internacional, que demuestra el impacto transformador de la tecnología.
El análisis detallado reveló que los usuarios chilenos lograron un Tiempo en Rango (TIR) del 78,3% y un Tiempo en Rango Estrecho (TITR) del 55,4%. Estas cifras no solo superan los promedios globales (77,6% y 52,5% respectivamente), sino que representan un control glucémico óptimo, crucial para reducir significativamente el riesgo de complicaciones a corto, mediano y largo plazo. El Tiempo en Rango (TIR) mide el porcentaje de tiempo que los niveles de glucosa se mantienen dentro de los rangos recomendados, mientras que el Tiempo en Rango Estrecho (TITR) se enfoca en un rango aún más ajustado, indicando un control aún más preciso.
“Estos resultados muestran que los usuarios chilenos alcanzan un control glucémico óptimo, comparable —e incluso superior— al promedio mundial. Es un ejemplo de cómo la tecnología puede mejorar los resultados clínicos en distintos contextos”, señaló el Dr. Vigersky.
Evidencia global con potencial aún mayor
Los datos recopilados para este análisis provienen de la plataforma CareLink™, una base de datos global que analiza de forma anonimizada la información de más de 374 mil personas con diabetes tipo 1 usuarias del sistema en todo el mundo.
Lo más notable es que, a pesar de que solo un 31% de los usuarios chilenos utiliza la configuración óptima del dispositivo (objetivo de glucosa de 100 mg/dL y tiempo activo de insulina de 2 horas), sus resultados ya superan los promedios globales y regionales. Esto sugiere un potencial aún mayor para mejorar estos indicadores si se optimiza el uso del dispositivo.
Pero este éxito no es casualidad. Chile ha logrado este nivel de excelencia en el manejo de la diabetes tipo 1 gracias a un modelo de acceso pionero a tecnología avanzada en Latinoamérica, impulsado por políticas públicas innovadoras en salud.
La Ley Ricarte Soto, al financiar tratamientos para enfermedades de alto costo, ha sido fundamental. Desde su implementación, ha permitido que más personas con diabetes tipo 1 accedan a sistemas automatizados de administración de insulina (AID), facilitando un manejo más efectivo y seguro de su condición. Esta ley ha democratizado el acceso a terapias innovadoras, integrando la tecnología como parte esencial del tratamiento habitual en el país.
Así, la combinación estratégica de cobertura pública, formación médica especializada y un acompañamiento continuo ha sido la clave para alcanzar los sobresalientes indicadores clínicos observados en esta evidencia global.
“Chile es un ejemplo a seguir en la región de Latinoamérica y el mundo. La implementación de políticas públicas como la Ley Ricarte Soto promueven el acceso a más pacientes a tecnologías avanzadas y es una iniciativa que nos acerca cada día más a cumplir con el objetivo de que estos sistemas sean el estándar para las personas con diabetes tipo 1”, agregó el Dr. Vigersky.
Tecnología que transforma el manejo de la diabetes
En el corazón de estos resultados está el sistema MiniMed™ 780G. Esta tecnología automatizada de administración de insulina (AID, por sus siglas en inglés) representa un avance significativo, ya que ajusta y corrige automáticamente los niveles de glucosa. Esto no solo permite un control óptimo y reduce el riesgo de complicaciones, sino que también simplifica drásticamente la vida diaria de los pacientes.
Al combinar una bomba de insulina, un monitoreo continuo de glucosa y algoritmos inteligentes, el MiniMed™ 780G ofrece una gestión más sencilla y precisa para las personas con diabetes tipo 1, mejorando su calidad de vida y aliviando la constante carga del autocontrol.







