El Centro de Estudios en Seguridad y Crimen Organizado de la Universidad San Sebastián, CESCRO USS, realizó un análisis de los números que ha entregado el sistema de persecución penal en Chile durante la última década (2013-2023).
De esta manera, en el informe se ven reflejados el avance estadístico en diferentes materias, como en la cantidad de delitos ingresados a nuestro sistema penal; delitos ingresados con imputados desconocidos; número de términos judiciales y no judiciales aplicados; cantidad de condenados, distinguiendo según tipo de condenas, entre otros indicadores.
Principales resultados
El informe muestra un aumento del 16% en la cantidad total de delitos ingresados al Ministerio Público entre 2013 y 2023, que en números en números absolutos corresponde a 208.719 delitos más que hace 10 años.
En este sentido, de ese total de delitos ingresados a Fiscalía en la última década se observa un incremento del 26% en la cantidad de delitos con imputados desconocidos, pasando de 712.795 a 899.745. Esta cifra aumentó en tres puntos porcentuales desde el 2013 y desde el año 2014 es mayor a la de imputados conocidos.
Los términos judiciales más aplicados por la Fiscalía en la última década fueron las sentencias condenatorias, con un 36%; seguida por la facultad para no investigar y la suspensión condicional, con un 21% y 18% respectivamente. Sin perjuicio de lo anterior, al observar la evolución de dichos términos judiciales en la última década, se puede ver una importante disminución de las sentencias condenatorias, con un 26% y de las suspensiones condicionales, con un 69% en este caso. Además, se destaca un aumento considerable de las sentencias absolutorias, con un 89%, y de un 50% de los sobreseimientos definitivos.
Otro de los números importantes de destacar, es respecto a los términos no judiciales más aplicados por la Fiscalía en la última década, en el cual los archivos provisionales concentran el mayor número de casos con un 82%, seguidos por el principio de oportunidad y la decisión de no perseverar con un 10% y 7% respectivamente. En este sentido, se observa un considerable aumento en los archivos provisionales aplicados, con un 45% entre 2013 y 2023.
Por último, un indicador preocupante que también refleja el análisis realizado por CESCRO USS es que durante los últimos 10 años se puede ver una disminución de un 27% en la cantidad total de condenados, pasando de 302.662 a 220.580, donde los condenas por multas concentran el mayor número de casos con un 54%, mientras que la privación de libertad y las penas sustitutivas (Ley N° 18.216) presentan un 30% y 15% respectivamente para el mismo período.
La voz de los expertos
Para el director de CESCRO USS, Luis Toledo, este informe “da cuenta de un indiscutible deterioro en la calidad de la persecución penal en nuestro país, y que, lamentablemente, repercute en la confianza ciudadana y crea sensaciones de malestar y frustración ante e flagelo de la delincuencia”.
Ante esto, según el abogado y exfiscal, son diversas las causas y los responsables que han llevado a la situación tal como está. “Es evidente que no se puede mejorar este resultado con la misma forma de trabajo y también, no solo se puede solucionar con medidas solitarias, es decir, no todo se puede corregir ‘solo’ con una modificación legal, o ´solo´ con un aumento de presupuesto, o ´solo´ con un cambio en la organización institucional del Ministerio Público. Estas deben ser medidas multisectoriales y que estén alineadas bajo una política pública integral y que entregue las herramientas necesarias para combatir el nuevo sistema criminológico en Chile”, señala Toledo.
Camila Astrain, investigadora de CESCRO USS y quien lideró esta investigación, señala que “este informe demuestra que urge revisar el proceso de percusión penal para revertir las tendencias observadas, especialmente respecto a la aplicación de archivos provisionales. Además, el informe da cuenta de grandes desafíos en materia de detección y control de delitos para revertir la tendencia de los ingresos con imputados desconocidos por las dificultades a las que eleva la investigación”, señala nuestra investigadora.