Calles abarrotadas de vehículos es una de las imágenes que se repiten a diario en las distintas ciudades del país, situación que se ha hecho evidente tras el fin de las cuarentenas y en especial, luego del inicio del año escolar presencial.
Esta alta congestión se debe a que cerca del 70% de las familias chilenas tienen hoy un vehículo, y las vías no fueron consideradas para tener ese volumen de tráfico, aseguró el profesor de la Facultad de Psicología de la Universidad de Talca y experto vial, Emilio Moyano.
De acuerdo al académico, ante esta situación es vital considerar estrategias de autorregulación emocional, frente a la frustración que provocan los denominados tacos.
“No queda más remedio que un mecanismo psicológico de aceptación o afrontamiento del tema. Cuando se está en un taco, lo principal es aceptar que se avanzará lento y que se circulará a menor velocidad de lo normal”, indicó.
“Es necesaria la paciencia y no aceptar provocaciones de otros, que a veces tocan sus bocinas o son agresivos. En esos minutos, se puede aprovechar de escuchar música de agrado, oír un Podcast o generar pensamientos relajantes”, sugirió el experto.
Otra recomendación es no cambiarse de pista, ya que puede generar problemas y conflictos con otros conductores, sin considerar que esta estrategia no está probada como una maniobra útil para circular de forma más expedita. “Tendemos a creer que la pista de al lado va a una mayor velocidad que la nuestra, pero cambiarse de carril no ayuda en nada”, aseguró.
Por último, y tal vez lo más importante, es planificar el viaje de manera de evitar al máximo los horarios peak. “Salir 15 minutos antes o 15 minutos después puede ser suficiente para aliviar la congestión. Incluso, cambiar de trayecto buscando rutas alternativas para llegar a un destino”, precisó Moyano. El académico agregó que, los sistemas de mapeo de rutas más rápidas, como Waze o Google Maps, también pueden ayudar si se usan adecuadamente.