Reprogramar las horas de estudio y sueño, son algunos ajustes que los estudiantes tendrán que realizar debido al cambio de hora, ya que este sábado 02 de abril a las 00:00 horas, los relojes deberán atrasarse en 60 minutos.
La próxima semana será un tiempo de adaptación al nuevo horario que anuncia la aproximación de la estación más fría del año.
Al respecto, este sábado 02 de abril, los relojes a las 00:00 horas retroceden 60 minutos quedando a las 23:00 horas de la misma jornada. Es decir, esa noche, las personas tendrán un periodo extra de sueño, al otro día comenzarán las mañanas con más luz y por la tarde verán el sol esconderse más temprano.
El nuevo horario, requiere algunos ajustes en los hábitos de vida de las personas. En el caso de los estudiantes, deberán arreglar el tiempo de descanso, los espacios de estudio y comida, entre otros aspectos.
“Lo más probable es que en la semana de adaptación, tengamos más sueño y eso nos puede llevar a estar más irritables y propensos a afectación de atención, concentración y memoria. En general nos podemos sentir con menos energía, disminución en la productividad y quizás más tristes o desganados”, aseguró Bárbara Letelier, psicóloga y asesora curricular del Proyecto de Formación Inicial Docente (FID) de la Universidad Católica del Maule (UCM).
En este sentido, es importante identificar estos síntomas para asociarlos al cambio de horario y tomar algunas medidas que pueden ser útiles para la adaptación.
Recomendaciones
Rendir bien en el colegio, universidad, trabajo o cualquier ámbito es importante. Por ello, hay varias recomendaciones que pueden servir para el nuevo horario.
“Es importante tratar de tomar algunos rayitos de sol, adaptar las horas de levantarse, acostarse y comidas, es decir, proyectarlas, para dormir y descansar lo suficiente. Y en lo posible hacer actividad física”, agregó la especialista.
Respecto al tiempo de sueño y calidad, el cual es necesario para que la persona se sienta en óptimas condiciones, Letelier, también entregó algunas consideraciones.
“Recordar que, para favorecer el descanso, hay que evitar siestas largas, no alimentarse tan tarde ni consumir bebidas energizantes. Evitar la utilización de elementos que requieran mucha atención, justo antes de acostarse”, agregó.
Cabe mencionar que el cambio de horario significa un proceso de adaptación, el cual también puede iniciarse desde esta semana, previo al ajuste de relojes. Se puede lograr reprogramando actividades de a poco, alimentación y descanso.