La estimación de la tasa de desocupación en la región del Maule se situó en 8,6%, disminuyendo 2,3 pp. en doce meses, como consecuencia del aumento de 4,9% de la fuerza de trabajo y el crecimiento de 7,6% de las personas ocupadas. Por su parte, los desocupados presentaron una baja de 16,9%. Según sexo, la tasa de desocupación de hombres fue de 8,1%, cifra menor a la tasa de las mujeres que alcanzó 9,5%.
En doce meses, la estimación del total de ocupados aumentó 7,6%, siendo incidido principalmente por los hombres que aumentaron 10,4%, seguidos por las mujeres que registraron un alza de 3,5%.
Según categoría ocupacional, los trabajadores por cuenta propia (29,1%) y los asalariados del sector privado (3,8%), fueron las categorías que incidieron en la expansión de los ocupados.
A nivel nacional, la tasa de desocupación llegó a 9,5%. La cifra significó un descenso de 2,7 puntos porcentuales (pp.) en doce meses, producto del alza de la fuerza de trabajo (9,2%), menor a la presentada por los ocupados (12,6%) y a la disminución de 15,1% en los desocupados, incididos únicamente por los cesantes (-17,0%).
Según sexo, la tasa de desocupación de las mujeres se situó en 9,7% y la de los hombres en 9,3%, decreciendo 2,0 pp. y 3,3 pp., respectivamente.
Los ocupados tuvieron un aumento de 12,6% incididos, en mayor medida, por los hombres (12,0%) que por las mujeres (13,4%). Por su parte, el segmento de ocupados ausentes (que representó el 10,6% del total de ocupados), disminuyó 34,5% equivalente a 446.831 personas.
La expansión de los ocupados fue influida por construcción (40,2%), comercio (13,0%) y alojamiento y servicio de comidas (37,6%). En tanto, por categoría ocupacional, los principales aumentos se presentaron en trabajadores por cuenta propia (35,1%) y asalariados formales (6,6%).
La tasa de ocupación informal se situó en 26,0% creciendo 3,6 pp. en doce meses. Asimismo, los ocupados informales aumentaron 30,8% incididos, tanto por los hombres (28,5%) como por las mujeres (34,0%), y por los trabajadores por cuenta propia (43,0%).
Estacionalidad y volumen de trabajo
La tasa de desocupación ajustada estacionalmente elimina los efectos de los factores exógenos estacionales de naturaleza no económica que influyen en su comportamiento coyuntural, en este sentido, el indicador estimado fue 9,5%, retrocediendo 0,4 pp. con respecto al trimestre móvil anterior, como consecuencia de la disminución de la fuerza de trabajo (-0,3%) y los desocupados (-3,9%) y el aumento de los ocupados (0,1%).
En doce meses, el volumen de trabajo medido a través del número total de horas efectivas trabajadas por los ocupados creció 25,3%. De igual modo, el promedio de las horas trabajadas aumentó 11,3%, llegando a 36,0 horas.
La tasa combinada de desocupación y fuerza de trabajo potencial (que mide el número de personas desocupadas más personas iniciadoras disponibles e inactivos potencialmente activos) alcanzó 20,5% con una disminución de 9,3 pp. en el período. En los hombres el indicador se situó en 18,3% y en las mujeres en 23,5%. La brecha de género fue 5,2 pp.