En un contexto de cambio climático y sequía, resulta esencial optimizar los recursos hídricos intraprediales, para contribuir a la sustentabilidad de los sistemas productivos agrícolas. Especial desafío cabe a la agricultura familiar campesina (AFC), donde las restricciones se agudizan en sus dimensiones económica, social y ambiental.
Estos aspectos obstaculizan el desarrollo de la actividad agrícola y la eficiencia del recurso hídrico lo que impide incorporar más superficie de riego. Además, los problemas de diseño y de mantención de equipos de riego, incrementan la debilidad e ineficiencia del sistema, lo que junto a la ausencia de información técnica del funcionamiento de los equipos, han impedido tomar medidas correctivas o de fomento para focalizar, de mejor manera, las inversiones.
Ante este diagnóstico, la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) impulsó el “Programa de innovación en el uso eficiente del recurso hídrico para la pequeña agricultura de las regiones de O’Higgins y del Maule”, que desde fines de 2020, empezó a ejecutar INIA, a través de sus Centros Regionales INIA Rayentué e INIA Raihuén. Este proyecto apunta a desarrollar un programa de innovación en transferencia de tecnologías de riego, que haga más eficiente el uso del agua por parte de pequeños y medianos productores en ambas regiones, y mejorar sus unidades productivas.
Según indicó el coordinador del proyecto, Abelardo Villavicencio, lo que se busca es generar, al interior de la AFC, las capacidades técnicas y de gestión que permitan obtener la máxima productividad en el uso de los recursos hídricos disponibles, transfiriendo tecnologías de riego eficientes y racionales. El especialista añadió que tales acciones permitirían, además, identificar y proponer oportunidades de mejora de eficiencia hídrica a los productores, mediante actividades de capacitación y difusión de diversos contenidos técnicos.
El profesional de INIA explicó que el programa beneficia a 100 agricultores de O’Higgins y del Maule, además de 120 alumnos provenientes de la Escuela Agrícola Don Gregorio, de Chimbarongo; del Liceo Agrícola El Tambo, de San Vicente de Tagua Tagua; del Liceo Técnico Profesional Simón Bolívar, de Curicó y del Liceo Agrícola Sagrados Corazones, de Villa Alegre.
Villavicencio destacó la evaluación de sistemas de riego tecnificado realizada a 100 productores, 50 en cada región, que permitió conocer el grado de funcionamiento y estado de los equipos. Agregó que en la actualidad se está realizando la sistematización de la información recogida, a partir de lo cual se definirá un programa de capacitación para revertir las principales debilidades detectadas.
Al respecto el representante de FIA en las regiones de O´Higgins y del Maule, Robert Giovanetti, planteó que “desde la mirada institucional de FIA, este programa será un gran aporte, ya que en estas dos regiones, estos últimos años ha existido una sostenida disminución de precipitaciones, lo que ha provocado que los diferentes productores tengan una baja disponibilidad de agua para riego, esta nueva realidad obliga a innovar en la implementación de soluciones tecnológicas que permitan hacer más eficiente el uso del agua, principalmente en AFC quienes muchas veces no tienen conocimientos de las nuevas tecnologías e infraestructuras que actúan como herramientas para hacer frente a este desafío. Cabe destacar que debido a la importancia de este programa por todos sus aspectos técnicos y metodológicos, esta iniciativa se está replicando también en las regiones de Atacama, Coquimbo, Valparaíso, Metropolitana y Ñuble.”.
En tanto, la directora regional de INIA Rayentué, Sofía Felmer, resaltó la importancia del proyecto, toda vez que “las limitaciones de agua nos obligan a ser más eficientes en su uso y esto depende en gran parte de cómo manejamos el riego, y para ello es necesario contar con un buen diseño del sistema, sin dejar de lado la operación y mantenimiento de los equipos de riego, como la calibración, la programación de riegos en tiempos y frecuencias, de acuerdo a las características del cultivo y del suelo, entre otros factores que serán todos analizados con los agricultores y agricultoras; estudiantes y docentes que están participando de este proyecto”.
En tanto el titular de INIA Raihuén, Rodrigo Avilés, señaló que “como INIA buscamos contribuir a la sustentabilidad de los sistemas agrícolas regionales. Este proyecto permitirá establecer un programa de innovación y transferencia tecnológica, focalizado acciones con agricultores, estudiantes y docentes de liceos agrícolas y extensionistas de ambas regiones, de forma de generar condiciones para un trabajo que se extienda más allá de la temporalidad de la iniciativa.”
La voz de los productores
El productor Juan Avendaño, del sector El Porvenir de Talca, secretario del Comité de Agencia de Área de INDAP por San Clemente y delegado por los productores de berries en la misma zona, con 1,5 ha de riego tecnificado por goteo y fertirrigación en cultivos de mora híbrida desde el año 2020, manifestó que “un proyecto de este tipo me parece excelente porque uno ahí puede ver las falencias que pueden presentar las instalaciones o la manera en que se está utilizando el riego.
Toda la asesoría o capacitación de un recurso tan vital como lo es el agua es de beneficio para todos, porque va a llegar un momento que todos los agricultores vamos a depender del riego tecnificado por la escasez de agua, y tenemos que estar preparados para ello”.
Finalmente, la señora Pamela Pallamar, quien junto a su marido Miguel Soto, conforman un matrimonio de agricultores del sector El Naranjal de la comuna de San Vicente de Tagua Tagua, valoró la visita de un profesional INIA para evaluar el sistema de riego. “Me parece que ha sido muy bueno y en el momento justo, ya que también me he adjudicado una bomba, un filtro, cintas y layflat, y todos los materiales para implementar el riego a goteo, a través de PRODESAL”.
Asimismo, destacó la capacitación asociada, toda vez que le permitirá “orientarme mejor en todo lo que corresponde al correcto uso y manejo del sistema de riego”.