CURICÓ.- En un hito marcado por los sentimientos y un profundo significado fue inaugurado la jornada de este miércoles en el cementerio municipal de esta ciudad, el primer Memorial Bebé Estrella del país, hecho que trasciende más allá de la política y la religión y que cala en el corazón de toda una comunidad.
La ceremonia fue encabezada por el alcalde de la comuna Javier Muñoz Riquelme, quien fue acompañado por los concejales Paulina Bravo, Inés Núñez y Francisco Sanz, asistieron el director del cementerio municipal Roberto García, la directora de desarrollo comunitario Pilar Contardo y el director del hospital provincial Jorge Canteros, junto al equipo de Maternidad Lila.
La iniciativa que en su momento fue aprobada por unanimidad del concejo municipal y cuya primera piedra fue instalada el 10 de abril del presente año, tiene como principal objetivo generar y poner a disposición un espacio físico en el cementerio municipal al cual las personas que han sufrido la pérdida gestacional, perinatal o neonatal, pueden acudir y mantener un especial vínculo con ese ser que ya no está, pero que habita de manera profunda en el corazón.
Sobre la relevancia y lo que significa la creación e inauguración del citado memorial, se refirió el alcalde Javier Muñoz, quien compartió plenamente los sentimientos de emoción especialmente de los padres que por esas cosas de la vida sufren en el alma el vacío al contar con un Bebé Estrella. De la misma forma el jefe comunal agradeció a todos quienes fueron parte de la iniciativa, que según los antecedentes es la primera en el país.
“Yo solamente quiero agradecer a todos los equipos, desde el hospital, desde maternidad Lila, desde la municipalidad, de la oficina de la mujer, desde el cementerio municipal que trabajaron en esta temática y sobre todo agradecer a las familias que han tenido la fortaleza y el coraje de visibilizar su realidad a través de sus casos y de darnos una tremenda oportunidad de aprender y de acompañarlos en este proceso. No tenemos antecedentes y nos han dicho las propias familias de que en algún cementerio exista un lugar como éste. Si es así, tremendamente y doblemente orgulloso que seamos desde Curicó quienes podamos marcar un hito importante y que a lo mejor va a ser replicado, no me cabe la menor duda en muchos otros cementerios del país, así que estamos tremendamente contentos y muy, muy emocionados por este momento que estamos viviendo hoy”, señaló el alcalde Javier Muñoz.
No ajeno a la trascendencia de la obra y a los sentimientos que marcaron la ceremonia de inauguración del Memorial Bebé Estrella en Curicó, el director del cementerio municipal Roberto García, tuvo palabras especiales las que fueron más allá de una obra de cemento y ladrillos, dado a que el principal hito fue marcado en el corazón de cada uno de los padres que se vieron reflejados con una iniciativa que muy bien les identifica.
“Ha sido un momento muy emotivo, muy esperado, que muchas veces fue invisibilizado, la verdad que nosotros hoy día estamos marcando un hito muy importante en los corazones de los papás, es un memorial único en su estilo a nivel nacional, pero más allá de eso creo que hoy día también estamos respondiendo con empatía y cariño a todo ese dolor que vivieron tantas mamitas y que muchas veces se invisibilizó. Quiero agradecer a nuestros funcionarios del cementerio municipal de manera especial porque han trabajado con tanto cariño, esto es una obra autofinanciada que hemos realizado acá en el cementerio y por supuesto también agradecer el respaldo que siempre tuvimos por parte de nuestro alcalde Javier Muñoz, del concejo municipal y de todas las personas que nos instaron a llegar a término con esta obra que fue encabezada por la arquitecta Jessica Fredes”, resaltó Roberto García.
Para Javiera Ortiz, profesional perteneciente a Maternidad Lila del hospital provincia de Curicó, la creación del Memorial Bebé Estrella, también marca un antes y un después en la vida de las personas que día a día viven la amarga experiencia de haber sufrido la pérdida prematura de un ser tan importante como lo es un hijo o una hija. Si bien es un hito en medio de un duelo, pero que ha venido a entregar también un puñado mágico de felicidad.
“Sabemos que esto va a llegar a ayudar a procesar este tipo de duelos que son bastantes invisibilizados, el que la sociedad les esté dando un espacio hoy día a esos hijos o hijas que muchas veces ni siquiera una puede nombrar es algo muy, muy importante, una manera de resignificar el dolor de una manera muy especial también, así que estamos muy contentos, muy emocionados. La felicidad está hoy día bastante presente, es algo difícil de hablar en medio de un duelo, pero se puede”, enfatizó Javiera Ortiz.
Sin duda que la voz más autorizada al momento de un balance es la voz de las madres, de aquellas mujeres cuya fortaleza ha sido incalculable y silenciosa, llena de esperanzas y sueños en que un día la articulación de una acción, grande o pequeña les pueda brindar un pequeño descanso. Así lo manifestó Claudia Díaz Mella, madre de Gaspar Andrés, su Bebé Estrella.
“Le verdad esto es un cierre de una etapa, es brindarle dignidad a mi hijo, es todo lo que yo podría haber terminado de hacer aquí en la tierra, pero sobre todo es tener un lugar digno, es un descanso enorme en el corazón luego de sufrir mucho creo que esto es lo que a uno le viene y le dice “se puede” y eso es maravilloso, es muy maravilloso. Se agradece enormemente la gestión de la administración municipal actual de don Javier Muñoz, junto con el director del cementerio y Maternidad Lila, quienes han sido muy, muy empáticos con nosotros, con todas las mamitas”, indicó Claudia Díaz.
La creación del Memorial Bebé Estrella consideró la intervención de un espacio de 6,25 metros cuadrados con una inversión superior a los 5 millones de pesos, recursos netamente municipales y cuyas obras de ejecución estuvieron a cargo de personal del cementerio municipal. Contempló un muro de la memoria destinado a la instalación de placas conmemorativas en forma de estrellas, las que llevarán los nombres de los nonatos. Luz imperecedera la que cuenta con una vela como símbolo del vientre materno y que durante las noches será proyectada hacia el cielo pudiendo ser apreciada desde distintos puntos de la ciudad y el Sepulcro, espacio destinado a la sepultación de los Bebés Estrellas.
Al final de la jornada, nada importará más que mirar el cielo curicano durante la noche, de cualquier noche y apreciar desde lo más profundo del corazón una luz infinita… la luz de un Bebé Estrella.