El viaje se preparó, por razones de seguridad, bajo riguroso secreto. Sin embargo, no era un secreto que Volodimir Zelenski cruzó el mundo para llegar a Washington a “fin de agradecer la ayuda norteamericana”… y pedir su aumento. El crudo invierno ruso -inevitablemente compartido con Ucrania- ya ha empezado.
La Navidad, dijo Zelenski en el Congreso, será celebrada “tal vez a la luz de las velas. No porque sea más romántico, sino porque no habrá electricidad. Millones no tendrán ni calefacción ni agua corriente. Es el resultado de los ataques con misiles y drones rusos contra nuestra infraestructura energética”.
Fue un discurso bien preparado, culminación de las apretadas pero significativas 10 horas que estuvo en Estados Unidos. Fiel a su pasado como actor, Zelenski, en un inglés calificado por The New York Times como “vacilante” y “entrecortado”, combinó la elocuencia con el orgullo patrio (“Ucrania nunca pidió a los soldados estadounidenses que lucharan en nuestra tierra en nuestro lugar”).
También hizo un paralelo histórico, al recordar la batalla de las Ardenas, en Francia: entonces, dijo, la tiranía nazi “arrojó todo lo que tenía contra el mundo libre… y (contra) los valientes soldados estadounidenses que mantuvieron sus líneas y lucharon contra las fuerzas de Hitler durante la Navidad de 1944. Los valientes soldados ucranianos están haciendo lo mismo con las fuerzas de Putin esta Navidad”.
El Presidente ucraniano cree, en suma, que:
1.- 2023 será un año decisivo, en que Ucrania ganará finalmente la guerra desatada por Rusia, gracias a sus soldados y la ayuda de Occidente..
2.- Vladimir Putin no tiene interés en negociar y por eso quiere aprovechar a su favor el invierno y el paso del tiempo. Podría estar preparando su peor ofensiva.
3.- Irán es un peligroso aliado de Rusia con sus drones. Ello, advirtió, representa un riesgo para otros países, en especial Israel.
4.- Junto con agradecer la ayuda norteamericana, insistió en que necesita más pertrechos, en especial tanques y aviones. “Tenemos artillería, sí. Gracias. La tenemos. ¿Es suficiente? Honestamente, no”. Los cohetes “Patriot” fueron sumamente bienvenidos.
En resumen, se mostró emocionado y confiado: “Rusia podría detener su agresión, de verdad, si quisiera (y no lo hará), pero ustedes pueden acelerar nuestra victoria. Y eso, demostrará a cualquier potencial agresor que nadie puede romper las fronteras nacionales, nadie comete atrocidades y reina sobre las personas en contra de su voluntad. Sería ingenuo esperar los pasos hacia la paz de parte de Rusia, que disfruta siendo un estado terrorista. Los rusos todavía están envenenados por el Kremlin.
“La restauración del orden jurídico internacional es nuestra tarea conjunta. Necesitamos paz. Ucrania ya ha hecho propuestas. Acabo de discutir con el Presidente Biden nuestra fórmula de paz: diez puntos que deben implementarse para nuestra seguridad conjunta, garantizada para las próximas décadas.
“Me complace decir que hoy el presidente Biden apoyó nuestra iniciativa de paz. Cada uno de ustedes, damas y caballeros, puede ayudar en la implementación para garantizar que el liderazgo de Estados Unidos siga siendo sólido, bicameral y bipartidista”.
El apoyo, visible en las repetidas ovaciones de pie en el Congreso pleno, está asegurado por ahora. Pero el tiempo, como reconoció Zelenski, trabaja en su contra.
Abraham Santibáñez