Según Carabineros de Chile, en 2023 la mayoría de los accidentes de tránsito con víctimas fatales se registró entre las 19 y 22 horas[1]; una tendencia que también se repite en el mundo. Y es que aquí y en todos los lados, los factores que inciden en este tipo de eventos suelen ser la pérdida o disminución del campo visual debido a la falta de luz solar, una menor apreciación de la velocidad y el movimiento, y por supuesto, el sueño o el cansancio a causa de una jornada que está terminando.
En este contexto, los expertos llaman a adoptar medidas básicas para minimizar accidentes vehiculares en este horario. “Conducir de noche presenta una serie de desafíos únicos que requieren atención y precaución adicionales. La visibilidad reducida, la fatiga y la presencia de conductores fatigados o incluso intoxicados son factores que aumentan el riesgo de accidentes durante las horas nocturnas”, comentan desde Reale Seguros, aseguradora italiana con presencia en Chile desde 2017.
A continuación, desde la multinacional entregan una serie de consejos para garantizar la seguridad personal y colectiva a la hora de conducir un vehículo en ruta después del atardecer:
1) Chequear periódicamente la iluminación: “El cuidado del vehículo es fundamental para comenzar a mitigar los riesgos. Un punto determinante es mantener una iluminación adecuada: se debe revisar cada cierto tiempo el funcionamiento de ampolletas y confirmar que los faros estén bien alineados. Una vez en ruta, hay que utilizar las luces altas con precaución, pues, de lo contrario, puede afectar a quien viaja en sentido contrario”.
2) Reducir cansancio de la vista: “Para reducir la fatiga ocular (un problema común ya que los ojos deben adaptarse a los cambios de luz) es importante considerar un óptimo descanso. Al estar fatigado física y visualmente aumenta el tiempo de reacción y disminuye la capacidad de concentración. Por lo mismo; si usted percibe problemas, mejor deténgase. Y en caso de viajes largos, una opción es tomar descansos regulares”.
3) Actitud defensiva en la pista: “Los conductores deben evitar mirar directamente a las luces de los vehículos que vienen en sentido contrario. Para esquivar el deslumbramiento y la fatiga ocular hay que desviar la mirada ligeramente hacia el borde derecho de la carretera. Una actitud defensiva en la pista puede ayudarnos a minimizar todos los riesgos”.
4) Velocidad moderada: “Esto ayuda a reaccionar mejor ante los imprevistos; sobre todo en las noches cuando la visibilidad reducida hace más difícil identificar obstáculos o peligros en la carretera. Además, es necesario aumentar la distancia con el vehículo que nos antecede y redoblar la atención con peatones y animales. Por ningún motivo distraerse con el teléfono”.
5) Puertas siempre cerradas: “Para seguridad personal y del grupo, mantenga las puertas cerradas y elija estacionar en zonas bien iluminadas y concurridas. Está demás decir que tanto el conductor como todos los pasajeros del vehículo deben ponerse su cinturón de seguridad. Conducir de noche no tiene por qué ser una experiencia estresante si se toman las precauciones adecuadas”.