Con una orientación en la atención temprana, diagnóstico, prevención y en la educación a padres y madres, la Universidad de Talca, a través de su Facultad de Odontología, ha reactivado su emblemática Clínica del Bebé. Este espacio, ubicado en el Campus Lircay, no sólo beneficia a la comunidad con distintos servicios en odontopediatría sino a la formación de los estudiantes de esta especialidad.
Carolina Barrios Castro, encargada de la clínica y docente del postgrado de Odontopediatría, indicó que la clínica busca ofrecer una atención real y oportuna desde la primera infancia, integrando a profesionales como fonoaudiólogos y terapeutas ocupacionales.
“Queremos abordar todas las dimensiones del desarrollo infantil desde los primeros meses de vida, porque eso tiene un impacto directo en la relación que los niños tendrán con la odontología en su vida adulta”, explicó.
Glenda Skinner, fonoaudióloga de la UTalca y especialista en motricidad orofacial, cumple un rol clave en este modelo. “Evaluamos funciones vitales como succión, deglución, masticación, habla y respiración desde el nacimiento. Detectar alteraciones tempranas permite prevenir complicaciones a largo plazo y mejorar la calidad de vida del bebé y su familia”, señaló.
Este enfoque ha sido altamente valorado por las familias. Javiera Valenzuela, madre de la pequeña Lía, compartió su experiencia luego de la atención. “Mi bebé tiene frenillo lingual corto, así que vamos a trabajar con ellos el próximo mes para hacer el corte con láser. Ha sido de mucha ayuda, porque duele la lactancia con frenillo. Es un aporte muy bueno y beneficioso para ella y para mí también”.
Innovación tecnológica al servicio de la infancia
La clínica ha incorporado tecnologías de vanguardia como el uso de láser para procedimientos quirúrgicos y terapias como la fotobiomodulación y la terapia fotodinámica, útiles en el tratamiento de varias patologías. También se ha implementado el flujo digital, permitiendo escaneos orales sin necesidad de impresiones tradicionales, mejorando la experiencia del paciente desde sus primeros contactos con el odontólogo.
“Queremos invitar a la comunidad a conocer y difundir este espacio. Sabemos que en nuestra región hay una gran necesidad de atención bucal temprana, y estamos comprometidos con aportar desde la prevención y el tratamiento oportuno”, subrayó Barrios.
Un modelo con historia y evolución
Patricia Jiménez del Río, docente de pre y posgrado en Odontopediatría, recordó los orígenes de la clínica. “Nos remontamos al año 2014, cuando como directora del programa y del departamento, vimos la necesidad de hacer más visible la atención a bebés. Comenzamos con hijos de funcionarios y estudiantes, y gracias al apoyo de Colgate, logramos habilitar un espacio físico con insumos adecuados”.
Desde entonces, la clínica ha mantenido su esencia: atención temprana, diagnóstico, prevención y educación a padres y madres. Sin embargo, ha evolucionado significativamente con la incorporación de nuevas tecnologías y un enfoque transdisciplinario. “Hoy contamos con una fonoaudióloga experta en lactancia y motricidad orofacial, lo que nos permite asesorar a las familias en temas como alimentación complementaria y evaluación de frenillos”, destacó la académica.
Desde el punto de vista formativo, Jiménez señaló que, “estamos integrando a ortodoncistas, rehabilitadores orales, endodoncistas y fonoaudiólogos en la atención simultánea. Esto no solo beneficia al paciente, que recibe atención inmediata y coordinada, sino que también enriquece la formación de nuestros estudiantes con una visión interdisciplinaria real”.