TALCA.- Presentar una visión holística de la economía y entregar herramientas para implementar un modelo económico alternativo que deje de lado el lucro y la competencia y ponga énfasis en la contribución al bien común y la cooperación, fue parte de la Conferencia dictada el día viernes 16 de octubre por el experto austríaco, Christian Felber, gracias a la invitación realizada por el proyecto Maule Investment que ejecuta la Universidad Santo Tomás Talca.
La actividad realizada a través de la plataforma Zoom, contó con la presencia del Decano de la Facultad de Economía y Negocios de la UST, Enrique Paris; el director del Centro de Modelación y Negocios (CIMON) de la UST, Marcelo Chacana; el investigador asociado de CIMON y coordinador de Maule Investment, Guillermo Palma; el gerente de Andes Value Research, José Luis Martínez; además de académicos, empresarios y estudiantes de todo el país.
En sus palabras de bienvenida, el decano Paris dijo que era inspirador para los académicos y la comunidad tomasina en su conjunto tener la oportunidad de contar con la presencia de un académico con el prestigio de Christian Elber.
“Esta conversación se da en un momento bien especial para Chile porque nos aprestamos para una conversación sobre nuestro pacto social y la economía tiene mucho que ver con eso. Este debate muchas veces entre qué bienes son privados y qué bienes son públicos y que hay bienes que son públicos y nos pertenecen a todos. Entiendo que en lo que Christian ha escrito sobre EBC hay una reflexión muy profunda sobre cómo entender nuestras relaciones y las relaciones sociales y económicas y poner la centro de las decisiones a las personas”, comentó.
Christian Felber es escritor, profesor universitario y bailarín contemporáneo en Viena. Es el iniciador de la “Economía para el Bien Común” (EBC) y de la “Cooperativa para el Bien Común”.
Algunos de sus bestsellers incluyen “Cambiar todo”; “Crear una economía para el bien común”, “Dinero” y “Las nuevas reglas del juego”, que fue galardonado con el Premio Internacional del Libro de Economía del año por getAbstract 2014.
La Economía para el Bien Común recibió el Premio ZEIT-Wissen en 2017 y fue catalogado entre los 100 Changemakers Business de The Big Issue en 2019, entre otros reconocimientos internacionales.
El modelo de la Economía del Bien Común está basado en valores como la dignidad humana, solidaridad, justicia social, sostenibilidad ecológica, transparencia y participación democrática, y busca resignificar el éxito económico mediante indicadores que midan la contribución al bien común a través de un instrumento denominado Balance del Bien Común.
En este sentido aspiran a promover cambios en el marco legal y generar políticas públicas en los distintos países, que fomenten el desarrollo de una EBC en el plano legislativo, y al mismo tiempo en el ámbito social esperan aportar a la formación de seres humanos que vivan en función del bien común y que premien la contribución a este de las organizaciones públicas y privadas.
Escenario actual y sus proyecciones
Felber señaló que la EBC es un modelo económico con futuro y sostenible tal como “lo ha reconocido la Unión Europea donde ha recomendado su inclusión en el marco legal de la UE y sus países miembros”.
“El punto de partida es una crisis sistémica global que ya se constataba antes de la llegada del coronavirus y es un panorama de crisis mutlifacético y no todos los economistas neoclásicos tienen este tipo de crisis en sus pantallas principales. En la corriente principal de las ciencias económicas se está observando en primer lugar la renta per cápita o el balance comercial que sí son indicadores macroeconómicos, pero que igual no son los indicadores más relevantes para el alcance del objetivo de la economía que nosotros proponemos debería componerse de una manera más holística incluyendo la solución de todo este tipo de crisis”, explicó.
En este sentido el académico dijo que se deben considerar los límites ecológicos del planeta, donde de acuerdo a los postulados de la comunidad científica internacional los problemas ecológicos más graves son el cambio climático y la pérdida de la biodiversidad.
“Las consecuencias de la progresiva pérdida de especies no son previsibles y pueden ser consecuencias para las cuales no tenemos respuesta y pueden poner en peligro la supervivencia de la humanidad”.
Para conectar este escenario con la actual crisis del coronavirus, Christian Felber recordó que esta es una enfermedad zoonótica que ocurre debido a la presión medio ambiental de los seres humanos en los ecosistemas de los animales y las plantas, ya que “si nosotros redujéramos la presión mediambiental y practicáramos una economía más sostenible, no habríamos tenido ni el SIDA ni el Ébola ni el SARS-1, ni el MERS ni el COVID-19, porque son enfermedades evitables pero la condición para evitarlas sería una economía más sostenible de equilibrio ecológico”.
A su juicio hay conciencia en la población de que estamos frente a una crisis y en todos los países muchas personas opinan que el modelo capitalista actual “no sirve ni a la mitad ni a la mayoría de las personas ni mucho menos a la conservación de los ecosistemas planetarios”.
“En Austria entre el 80 y 90% de la población demanda un cambio profundo del sistema económico. Hay alternativas porque la economía no obedece a leyes naturales ya que se basa en un 100% en leyes sociales, políticas y democráticas con excepción de los límites planetarios. Las leyes de los mercados se pueden cambiar e incluso decidir que los mercados no formen parte de la economía”, puntualizó.
Respecto al dinero, señaló que éste debería jugar el papel del medio para alcanzar el bien común “y si el dinero se convirtiera en el fin esto ya no sería economía sino que se convertiría en su contrario que hoy llamamos capitalismo. Este es un mensaje importantísimo porque capitalismo y economía son contrarios, son conceptos opuestos”.
“Las Constituciones contemporáneas al tomar la decisión de si apoyar una EBC o el capitalismo, se decidieron a favor de la economía y en contra del capitalismo. Si las Constituciones están claras sobre cuál es el objetivo de la economía, nosotros nos preguntamos por qué no medimos el éxito
económico de acuerdo con el alcance de este fin”, indicó.
A nivel internacional más de dos mil empresas EBC y casi 400 han elaborado el Balance del Bien Común y en Chile cuatro lo han realizado. Tres bancos se han sumado, tres escuelas superiores y la primera universidad en Barcelona se encuentra trabajando en ello.
En el mundo existen 150 grupos locales distribuidos en Europa, América, África y Asia y se han fundado 19 asociaciones desde Austria hasta Chile.