Tras efectuar 16 actividades de cierre, el Fondo de Solidaridad e Inversión Social, FOSIS, culminó un emotivo y prolongado ciclo de certificaciones que se extendió por toda la Región del Maule, junto a casi 2 mil emprendedoras y emprendedores apoyados este año por el Gobierno, entregándoles capacitaciones y recursos de entre 450 mil y 700 mil pesos para iniciar o potenciar un negocio.
Así fue como el último de estos hitos de clausura de programas se desarrolló en el balneario de Duao, comuna de Licantén, con la actividad de cierre y certificación del Programa Emprendamos Semilla, versión Seguridades y Oportunidades, que favoreció a 137 usuarias y usuarios de Teno, Romeral, Vichuquén, Licantén, Hualañé y Curepto.
Previamente hubo masivas actividades de certificación territoriales en comunas tales como Linares, San Javier, Romeral, San Rafael, Constitución, Chanco, Yerbas Buenas, Talca, Curicó, Cauquenes y Maule, sellando un proceso de aproximados 7 meses de trabajo mediante el cual los y las beneficiarias recibieron capacitaciones, asesorías personalizadas, material didáctico y educativo, servicio de cuidado infantil gratuito y financiamiento para concretar o mejorar sus respectivos negocios, además de encontrar empleo en el caso de quienes optaron por trabajar de manera dependiente.
“Desde noviembre estuvimos recorriendo nuestra hermosa región para certificar a miles de mujeres y hombres que gracias a nuestro respaldo pusieron en marcha sus negocios, o hicieron crecer los que ya tenían, mejorando sus ingresos, su calidad de vida y la de sus familias. Aquello se enmarcó en el término de la ejecución 2024 de los Programas Emprendamos en sus versiones Semilla, Semilla Seguridades y Oportunidades, Básico, Avanzado y Emergencia, además de Apoyo a Tu Plan Laboral”, indicó la Directora Regional del FOSIS, Andrea Soto.
Gema González es de Vichuquén y confecciona tejidos en lana de oveja. Culminó su intervención con el FOSIS y confidenció que “me gustó mucho el programa. Nos enseñaron mucho y aprendí demasiado, además que pude comprar maquinaria y unas repisas para ordenar mi local”.
Gladys Campos -en tanto- es de Talca y tiene una pequeña amasandería en su hogar para comercializar sus productos en el vecindario. Reconoce que fue “muy bueno el apoyo del FOSIS. No me lo esperaba y pude comprar un horno, una batidora, una amasadora y una pesa, así es que estoy feliz porque podré aumentar y mejorar mi producción”.
En Empedrado vive Jhony Valdés, dedicado a la maestranza y a la mantención de maquinaria forestal. También postuló al FOSIS para mejorar el servicio que brinda a aserraderos y empresas forestales de la zona. “Todo esto fue espectacular. Enseña bastante y abre las puertas. Nos ayuda mucho para seguir creciendo y manejar mejor las redes sociales”, admite.
Otro testimonio lo entregó Geraldine Peña, de Colbún, quien trabaja en grabados y corte en láser, creando cuadros y otros productos. “Trabajo en el Hotel de Panimávida y puedo vender mis creaciones a los pasajeros. Fue excelente participar en el FOSIS. Las monitoras son muy humanas y muy preocupadas y nos apoyaron mucho. Todo fue muy cercano”, afirmó.