Chile encabeza el ranking mundial de preocupación por la salud mental, según un nuevo informe de la empresa de investigación Ipsos, que recoge percepciones de más de 30 países.
De acuerdo con el estudio, un 68% de los chilenos identifica la salud mental como el principal problema sanitario del territorio nacional, superando en 23 puntos al promedio global.
El informe, titulado “Servicios de Salud 2025”, reveló además que siete de cada 10 personas han experimentado síntomas depresivos al menos una vez, mientras que el 78% declaró vivir con estrés diario. A ello se suma que un 43% de los consultados tomó medicación o acudió a un profesional por motivos de salud mental, y que un 60% señaló los largos tiempos de espera como el primordial obstáculo del sistema sanitario.
En el ámbito clínico, las tendencias son evidentes. Carolina Alarcón, psicóloga del Centro Médico San Rafael, explicó que las consultas de salud mental han aumentado considerablemente, reflejando una sociedad más abierta a buscar ayuda profesional.
“Hoy estamos mucho más familiarizados con el tema. Ya no hay tanto estigma asociado a consultar con un psicólogo. Nos falta tomar conciencia de la importancia de los tratamientos preventivos, porque los pacientes a menudo llegan cuando ya se sienten sobrepasados y no tienen herramientas para manejar ciertas situaciones”, comentó.
La especialista detalló que las señales de alerta más comunes incluyen dificultades de concentración, alteraciones del sueño, disminución o incremento excesivo del apetito y una sensación persistente de tristeza o irritabilidad.
“La irritabilidad aparece mayormente en adultos. Si nos enfocamos en niños, niñas y adolescentes, resulta fundamental vigilar la presencia de conductas disruptivas, que no se acomodan a determinados contextos o bien, que no se espera que cursen en dicha etapa del ciclo vital”, sostuvo.
kinesiología y bienestar emocional
Con motivo del Día Mundial de la Salud Mental, que se conmemoró el pasado viernes, también se destacó el aporte de disciplinas complementarias.
Un estudio internacional con 347 mil participantes de 50 países dejó al descubierto que el 40% de los adultos con dolor crónico presenta depresión o ansiedad clínica, reforzando la relación directa entre cuerpo y mente.
En ese contexto, José Manuel Valdés, kinesiólogo del Centro Médico San Rafael, indicó que el ejercicio guiado por profesionales es una herramienta eficaz para mejorar tanto la funcionalidad física como el bienestar emocional.
“El ejercicio libera endorfinas que reducen el dolor y generan sensación de bienestar. Por eso, en pacientes con cuadros de salud mental o dolor crónico, se convierte en una terapia clave”, recalcó.
El kinesiólogo dijo que los programas más efectivos incluyen ejercicios cardiovasculares, de fuerza y de intervalos de alta intensidad, adaptados a la capacidad funcional de cada persona.
“Lo importante es tomar el ejercicio como un hábito de vida. No se trata solo de movimiento físico, sino de una forma de sanar desde lo biológico y lo emocional”, enfatizó.