Fue a través de la operación “Fortaleza”, que la Unidad de Alta Complejidad y Análisis Criminal (UNAAC) y la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado (BRIANCO) Talca, previa investigación de cerca de un año, lograron desbaratar una estructura criminal dedicada a cometer delitos de estafas (Phishing), asociación ilícita, infracción a la Ley de Armas, receptación y lavado de activos.
Los imputados operaban como un verdadero Call Center para estafar a miles de víctimas de todo el país.
En la investigación se logró acreditar que estas personas a través de información privilegiada y bajo el engaño, realizaban estafas telefónicas, especialmente a adultos mayores.
Posteriormente, invertían las ganancias obtenidas en propiedades de alto avalúo fiscal, vehículos de alta gama y joyas.
En ese sentido, el fiscal jefe UNAAC, Francisco Soto, sostuvo que “nuevamente la Unidad de Alta Complejidad y Análisis Criminal, acompañada de la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado Talca, realiza el desbaratamiento de una organización criminal, en este caso estamos hablando de crimen organizado, no es una investigación usual, no es un tipo de delito usual y no es habitual igualmente que se detengan a aquellas personas que realizan estafas telefónicas a través de los medios tecnológicos que se pueden observar”.
Agregó que “lo habitual es que se detenga a los testaferros, a terceras personas, y, en este caso, hemos detenido a lo que llamaríamos una base operativa de call center, para realizar estafas a personas de la tercera edad, que mantenían en sus cuentas corrientes grandes sumas de dinero y acceso al crédito en el sistema financiero, los cuales eran engañados por este grupo delictual mediante un sofisticado sistema, utilizando máquinas de pago o puntos de pago utilizados en las tiendas, sustrayendo las claves o las medidas de seguridad que tienen los sistemas bancarios y financieros como las tarjetas de pago, para sustraer estos dineros y posteriormente depositarlos y triangularlos en diferentes cuentas corrientes”.
Por su parte el jefe de la BRIANCO Talca, subprefecto Mauricio Fuentes, agregó que “la génesis del modo de operar de estos imputados es que su especialidad delictual era cometer delitos contra la propiedad y a través de la convivencia en los penales comenzaron a iniciar sus estafas desde los recintos carcelarios. Posteriormente, una vez que cumplieron condena y estando en libertad, empezaron a potenciar este delito, utilizando elementos más tecnológicos, denominados MTF, para poder decodificar las claves y códigos de seguridad, tanto de tarjetas de crédito como de débito, y así sustraer desde las cuentas corrientes dinero de las víctimas que potencialmente son adultas mayores”.
Apuntó que “es importante recalcar que esta estructura criminal estaba arraigada en el Maule, operaba en Talca, Pelarco y Curicó. Ellos, a través de testaferros, obtenían estos dineros, cambiando la ruta del mismo, comenzando a blanquear estas ganancias obtenidas, y, producto de este proceso investigativo, donde se aplicaron diversas técnicas se logró el lunes 15 desarticular la totalidad de esta organización criminal”.
Más de 3 millones de pesos es el avalúo de los bienes incautados, entre ellos, 11 inmuebles, 10 vehículos, algunos de alta gama, más de veinte millones de peso en dinero en efectivo y divisas extranjeras, relojes, joyas, artículos electrónicos, entre otros.
Tras dos días de audiencia, la Fiscalía del Maule solicitó la medida cautelar de prisión preventiva, lo que fue otorgado por el tribunal para los 12 detenidos, fijando un plazo de investigación de 8 meses.