Moyra Muñoz, de la comuna de Curicó, es parte de las 100 seleccionadas a nivel nacional, que recibirán la nueva Beca Luksic-Más Mujeres en STEM, que consiste en un aporte económico mensual de $150.000, de libre disposición, para mujeres que estudian carreras técnicas de nivel superior, ligadas a las ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas.
A los 36 años, Moyra Muñoz dio un giro en su vida y decidió tomar una oportunidad: estudiar su primera carrera. Y esto, porque al salir de cuarto medio, su sueño de continuar sus estudios se vio truncado debido a dificultades económicas. En ese entonces, decidió emprender y realizar un curso básico de peluquería canina para poder generar ingresos, trabajo que ha mantenido por más de 13 años.
Hoy las tijeras, baños y cortes de pelo a mascotas, las combina con el mundo de las tuercas, llantas y electricidad. En 2023 y gracias a la beca STEM de INACAP, Moyra se matriculó en Técnico en Mecánica y Electromovilidad Automotriz. “Siempre me había llamado la atención y como ha sido catalogada como una carrera de hombres, al principio estaba muy lejos de mis opciones. Pero quise matricularme porque me interesa aprender mecánica, electricidad y todo lo que uno pueda para salir de cualquier problema, sin depender de otra persona”, explica la estudiante y madre de un pequeño hijo de tres años.
La curicana cuenta que la beca fue una muy buena oportunidad, pero compatibilizar el rol de ser madre, trabajadora independiente y estudiante no ha sido fácil, ya que durante los días debe trabajar en la peluquería y en las noches y fines de semana estudiar. “Estoy dando lo mejor de mí en esta carrera y a veces eso significa poder dedicar menos tiempo a la peluquería, por ende menos ingresos para mi familia”, cuenta Moyra.
Un nuevo apoyo para su formación
A principios de este 2024, se enteró de la nueva Beca Luksic Más Mujeres en STEM de Fundación Luksic, cuya postulación se realizó en alianza con los centros de formación técnica e institutos profesionales: INACAP, Santo Tomás, Duoc UC y AIEP. La beca entregará $150.000 mensuales a 100 mujeres de todo Chile que estudien carreras técnicas relacionadas a las ciencias, tecnologías, ingenierías y matemáticas.
Sin pensarlo dos veces, postuló y hace unos días fue notificada como una de las ganadoras. “Esta ayuda ha sido maravillosa. He podido costear material de estudio como fotocopias, impresiones, tinta y papel, así como también pagar parte de la locomoción. Me da mucha tranquilidad porque si un mes tengo que estudiar más y no puedo trabajar, se que tengo este apoyo para costear gastos básicos o alguna necesidad”, cuenta con emoción.
Becadas de norte a sur
Moyra es parte de las tres seleccionadas del Maule. Las regiones con mayor cantidad de ganadoras son en primer lugar la Metropolitana (25%), Valparaíso (14%), Biobío (9%) y Coquimbo (9%) y el rango de edad de las ganadoras es entre los 18 y 59 años, predominando las estudiantes de entre 20 y 22 años (26% del total). Del total, el 41% de las ganadoras de la beca son madres, el 67% declara ser la principal sostenedora del hogar y el 68% trabaja además de estudiar.
“Muchas mujeres enfrentan dificultades económicas para acceder y permanecer estudiando en la educación superior y la evidencia demuestra que las brechas de género son aún mayores en aquellas carreras que ofrecen una mejor empleabilidad y salarios, como lo son las ligadas al ámbito STEM. Por eso, queremos apoyar de manera concreta a las estudiantes que opten por este camino porque estamos convencidos de que a través de la formación, las personas pueden mejorar sus trayectorias de vida y así también aportar al desarrollo de Chile”, explicó Isabella Luksic, gerente general de Fundación Luksic.
Moyra cuenta que es la única mujer de 30 estudiantes en su carrera pero que no ha sido una dificultad para sus estudios: “Mis compañeros me han incorporado, al igual que mis profesores que con mucha paciencia me explican. Me he sentido bastante acogida, las materias son difíciles, pero hay que meterle empeño, si es necesario levantarse más temprano y acostarse más tarde porque quiero darle estabilidad económica a mi pequeño”.
Estos meses Moyra ha aprendido álgebra, formar circuitos eléctricos, de luces, armar y desarmar motores, algo completamente nuevo para ella ya que nunca había usado herramientas mecánicas ni tenía cercanía con las matemáticas. “He podido darme cuenta de que no es tan difícil como pensé y que soy capaz de que tengo todas las capacidades y sí puedo lograr todo lo que me proponga. Sobre todo a futuro ser una gran profesional, realizada en todo sentido”, dice con orgullo.