La variabilidad en el tipo de cambio es un fenómeno que puede influir significativamente en la industria del turismo. En el caso de Chile, la reciente depreciación del peso chileno frente al dólar estadounidense plantea preguntas sobre cómo afectará a los visitantes y a la economía turística en general.
Al respecto, Tomás Parentini, dueño de Hostería Millahue, Cajón del Maipo, comenta sobre esta situación “el cambio en la relación entre el dólar y el peso chileno es una variable que siempre seguimos de cerca en nuestra industria. La depreciación del peso puede tener un impacto dual: por un lado, puede hacer que Chile sea un destino más atractivo para los turistas internacionales, ya que sus dólares pueden estirarse más; por otro lado, podría aumentar los costos operativos para las empresas locales que dependen de insumos importados”.
Para los turistas nacionales, la depreciación del peso podría influir en sus decisiones de viaje. Si bien los destinos locales podrían volverse más asequibles, los costos asociados con servicios turísticos que dependen de insumos extranjeros podrían experimentar un aumento.
Desde la perspectiva de los visitantes internacionales, la depreciación del peso chileno podría convertir a Chile en un destino más accesible y atractivo. Los turistas extranjeros podrían encontrar que sus presupuestos de viaje se extienden más, incentivando un aumento en las llegadas internacionales.
Estrategias para mitigar impactos negativos
Para mitigar posibles impactos negativos, tanto los empresarios turísticos como las autoridades competentes están explorando estrategias para mantener la competitividad y garantizar la sostenibilidad del sector.
Sin duda, el cambio en el tipo de cambio entre el dólar y el peso chileno plantea desafíos y oportunidades para la industria turística. La adaptabilidad de los actores clave en este sector será crucial para maximizar los beneficios y minimizar los posibles inconvenientes.