TALCA.- Con un solemne acto realizado en la Plaza Pamela Toledo del sector Cancha Rayada de Talca, que recuerda a la menor de 12 años quien fuera la primera donante de órganos pediátrica en Chile, autoridades encabezadas por el delegado presidencial regional, Humberto Aqueveque, junto a los padres de la joven, seremis de Salud y Justicia, y la directora del Servicio de Salud, entre otras autoridades, conmemoraron un nuevo Día Nacional del Donante de Órganos y Tejidos Humanos.
Esta fecha recuerda el fallecimiento, tras sufrir un aneurisma cerebral, de Pamela Toledo Ortiz, niña de 12 años, talquina, quien en 1995 comunicó a su familia esta decisión que permitió salvar dos vidas y que, en recuerdo de ese noble gesto, cada año se conmemora esa fecha en Chile.
“Recordar a una niña que con sólo 12 años toma una decisión que no sólo es trascendental para la vida de ella, sino que permitió salvar otras vidas. ¿Cuántas otras vidas cambió Pamela? ¿Qué hubiéramos decidido nosotros a los 12 años, teníamos una visión tan noble como ella? Esto no es sólo importante para la ciudad de Talca, sino que para el país y por eso agradecemos ser parte de esta conmemoración”, destacó el delegado Aqueveque.
Según comentó la autoridad, a nivel país, son 3.033 personas que esperan un órgano para seguir viviendo. Es por eso que Aqueveque insistió en seguir avanzando a la donación y que las familias respeten la decisión de quienes deciden serlo.
Por su parte, el padre de Pamela, Roberto Toledo, recalcó el inmenso legado que su hija dejó en la sociedad. “Siempre estamos recordando a Pamela, en cualquier situación e ir multiplicando lo que es la donación de órganos y hacemos el llamado a clarificar esto de la donación, ya que, según estadísticas, de todos quienes han expresado ser donantes, alrededor del 60% de ellos, sus familias se niegan, cuando la ley señala que deben respetar su decisión”, explicó.
A su vez, María Elia Ortiz, madre de Pamela instó a la ciudadanía a conversar este tema en familia. “Hay que saber si el otro es o no donante, respetar la decisión de cada cual. Jamás en la vida se me habría imaginado que una niña tan pequeña dedicada a su familia, colegio y scout tomara una decisión que moviera a un país. Pamela nos dejó una responsabilidad, una tarea”, recalcó.
Cuando se produjo el fallecimiento de Pamela, el aeródromo de Panguilemo no contaba con luces para el aterrizaje nocturno, por lo que se estaba contra el tiempo para que sus órganos llegaran a Santiago. Esto, motivó a que para cumplir el deseo de la menor, familiares y amigos, con sus automóviles particulares, iluminaron el lugar para que el avión de la Fuerza Aérea pudiera aterrizar y cumplir con su voluntad.
MIRADA DESDE SALUD
La seremi de Salud, Gloria Icaza expresó que “estamos en deuda como sociedad y personas como pamela son un ejemplo para nosotros y cómo podemos dar vida a través de la donación de órganos tras el fallecimiento o incluso en vida y por eso hacemos el llamado a conversar el tema en casa porque es un tema muy relevante”.
Asimismo, la directora del Servicio de Salud del Maule, Marta Caro, agregó que durante este año, ha habido 19 posibilidades de donación y sólo se pudieron realizar siete de ellas. “Es algo penoso y queremos seguir trabajando con las familias que son las que toman la última decisión de cumplir con el deseo que tomaron los pacientes”, finalizó.