La inteligencia artificial nos escucha más de lo que uno cree; no solo con el celular, tablet o computador, también dentro de casa. Los asistentes como Alexa, Siri o Google Home han traído infinitas comodidades, incluso hace unas semanas uno de estos sistemas entregó las instrucciones a una niña para ayudar a su madre mientras llegaba la asistencia médica.
Con cada instrucción que se le entrega, además de hacer lo que se le pide, el sistema recopila información. Si bien dichos datos se utilizan para mejorar el producto y generar una mejor experiencia de usuario, al aceptar los términos y condiciones se abre una ventana a ciertas preocupaciones respecto de la privacidad y seguridad.
“Alguna vez te has planteado cuánto saben de ti, de tu personalidad, por ejemplo. Se han realizado experimentos con algoritmos de inteligencia artificial con los cuales se podría reconocer a los miembros de una familia, sus rutinas e incluso prever ciertos comportamientos”, explica el experto en automatización e Inteligencia Artificial y fundador de la consultora BackSpace, Maurizio Pancorvo.
Por eso, si cuentas con este tipo de dispositivos de asistencia personal, Pancorvo entrega cinco recomendaciones sobre cómo manejar la información y así proteger tus datos personales de mejor manera:
Sé consciente sobre cómo funcionan los asistentes virtuales: Siempre están escuchando, esperando una palabra de activación, como por ejemplo “hey Siri”. Al detectarla, el asistente comienza a grabar tu voz y a enviarla a la nube para su procesamiento.
Usa la palabra de activación con moderación: Solo menciónala cuando estés listo para interactuar con el asistente virtual. Esto ayudará a reducir la cantidad de audio que se graba y se envía a la nube.
Desactiva el micrófono o la palabra de activación cuando no la estés usando: La mayoría de estos dispositivos tienen un botón que permite apagar el micrófono. Si no, muchos asistentes virtuales permiten desactivar la palabra de activación para que el asistente no escuche hasta que lo actives manualmente.
Revisa tus configuraciones de privacidad: La mayoría de los asistentes virtuales permiten ver y controlar tus configuraciones de privacidad. Por lo general, puedes elegir si deseas guardar tus grabaciones de voz o no, y si quieres o no compartir tus grabaciones con empresas de terceros.
Limita la recopilación de datos personales: En los ajustes de privacidad de estos asistentes, puedes a menudo optar por no permitir la recopilación de ciertos datos personales. Piensa qué información vas a compartir con el asistente, la recomendación es no utilizarlo para discutir temas sensibles, como información financiera o condiciones médicas.
Además, el experto recomienda siempre leer los términos y condiciones de las aplicaciones que los usuarios descargan y utilizan. “Es importante conocer qué estamos autorizando y hasta dónde entregamos acceso a nuestra información. Aléjate de conceptos como: ‘Recopilación de datos de terceros’, esto puede significar que la empresa está compartiendo tus datos con otras empresas; ‘Retención de datos’ o ‘Derechos de propiedad intelectual sobre tus datos’”, concluye Pancorvo.