Las especificaciones técnicas son una parte importante de un proceso de construcción. En ellas se establecen múltiples indicaciones a nivel de materiales, diseño y normas que, además, determinan implícitamente el costo de una obra. A menudo, según los especialistas, los ejecutores o propietarios de un proyecto no le dan la importancia que tienen.
Aunque el sector avanza a paso firme hacia una transición tecnológica que incorpora nuevas herramientas digitales en el acompañamiento de un proceso de construcción – desde el diseño hasta la etapa posterior, las especificaciones técnicas “siempre serán necesarias, ya que complementan la información geométrica”, aseguran desde el IDIEM.
Christian Gálvez, jefe de la división de especialidades del organismo técnico alojado en la Universidad de Chile, comenta que es un documento escrito, extenso y eminentemente técnico, cuya finalidad es complementar la información geométrica contenida en los planos de un proyecto.
“Las especificaciones técnicas son una parte importante de un contrato de construcción, ya que en este instrumento se establecen materialidades, determinan calidades e implícitamente define el costo de la obra. El desarrollo de ellas les corresponde a los diferentes proyectistas de especialidades en la construcción, en estas se “refleja” el proyecto a construir”, señala el experto del IDIEM, el centro de investigación, desarrollo e innovación de estructuras y materiales.
Todos los elementos que no se pueden representar o describir gráficamente en un plano se incorporan a una especificación técnica. Por eso, agregó Gálvez, abarcan aspectos tan diversos, como indicaciones respecto a la calidad de los materiales, criterios de diseño, consideraciones normativas, reglamentarias y legales, niveles de terminación y tolerancias, entre otros parámetros críticos de una obra.
Nuevos materiales
Las especificaciones tienen un carácter técnico. Esto significa que no promueven el uso de materiales determinados o nuevos sistemas constructivos. Es la industria la que debe mostrar las ventajas de las innovaciones, precisan los expertos de IDIEM.
“Actualmente los proyectos incluyen cada vez más elementos industrializados y estructuras modulares. Las especificaciones son el lugar perfecto para establecer requerimientos y definir atributos sustentables de los materiales”, puntualiza Christian Gálvez.
Sin embargo, las especificaciones también recogen modificaciones o nuevas tendencias del mercado, e incluso existen oportunidades de que puedan plasmar de mejor forma estos cambios, por ejemplo, en términos de desempeño de materiales, adherencia de pinturas y revestimientos, o rendimiento energético y calidad del ambiente interior a alcanzar, entre otros parámetros.
La evolución de las especificaciones
De acuerdo a los especialistas del IDIEM, muchas veces los ejecutores o mandantes de un proyecto constructivo no asignan a este documento la relevancia que necesita, con serias consecuencias. “Incluso puede provocar la quiebra de un contratista”, advierte Gálvez. Y es que una especificación técnica ambigua, imprecisa o contradictoria que no ha sido bien analizada durante la fase presupuestaria, solo implicará mayores costos, potenciales retrasos o un término anticipado de la obra.
El jefe de la división de especialidades de IDIEM enfatiza que “las especificaciones técnicas representan el requerimiento del mandante del proyecto, ya que apuntan a satisfacer sus necesidades. Se debe avanzar en que los proyectistas que las elaboren se adecúen a la obra en cuestión, evaluando las nuevas oportunidades que ofrece el mercado para la construcción. Es fundamental volver a relevar el rol de las especificaciones y las oportunidades que representa su buena definición, pues es relevante para el éxito de un proceso constructivo”.
