CONSTITUCIÓN.- Con gran preocupación el concejal Lorenzo Toledo dio a conocer la condición de peligro en la que se encuentra el entorno del conocido Faro Carranza al sufrir el derrame de una cantidad aún no cuantificada de desperdicios presumiblemente tóxicos de la faena de la minera Faro Carranza y que, según da cuenta, podrían llegar a ser extremadamente nocivos para la flora y fauna del lugar.
“Escurre mucho lodo que hoy le está provocando daños al humedal. Nos están haciendo daño a nuestra flora y fauna especialmente a las aves. Es algo que preocupa y que se ha hablado en el Concejo pero no ha quedado en nada y estamos preparando un recurso judicial para abordar el problema”, explicó el concejal Lorenzo Toledo quien además preside la comisión de Medio Ambiente de Constitución.
En el lugar existe un derrame de una masa viscosa amarilla de gran envergadura que al calor del sol se seca pero por la adyacente humedad, su profundidad y bordes se encuentran en pleno contacto con la superficie que es parte de los humedales de la zona, la cual es considerada por expertos como uno de los puntos más importantes para millones de aves migratorias que anidan año a año en primavera y ahora a solo metros de la contaminación. Entre las especies destacan flamencos, pelícanos, zarapitos, gaviotín monja, gaviotín elegante, gaviota cahuil, gaviota dominicana, gaviota caruma, además de otras.
Pero el entorno también es habitado por cientos de personas, las que hoy miran con especial preocupación lo que está pasando frente a sus casas.
José Molina, Presidente de la junta de vecinos Papirúa, piensa que esto es un riesgo: “Para nosotros es preocupante ya que se está contaminando el ecosistema que tenemos en el Faro Carranza que es además un lugar turístico tan precioso y vemos que las autoridades poco y nada se acercan a ver el daño que se le está produciendo a este sector”.
Añade que “la producción sobre la protección afecta bastante y no podemos tapar el sol con un dedo por el daño que se le está generando a los animalitos, al río y a nuestro sector”.
Demanda
El lugar de operación de la minera Faro Carranza corresponde a 3 hectáreas del fundo Estancia Flora, administración que, ante la falta de un buen manejo de residuos, decidió solicitar el fin del contrato de arriendo del espacio físico que permitía las faenas. Sin embargo, según da cuenta el administrador del fundo, Waldo Sepúlveda, esto no habría caído bien en la empresa la cual acudió a tribunales y demandó con el fin de seguir con las faenas pese al daño medioambiental que se presume que hoy estaría ocasionando en el sector.
“Hay una demanda y la hicieron ellos contra los patrones ya que ellos vieron que le está haciendo mucho daño al fundo y no le quieren arrendar más y ellos demandaron para obligar a que les arrienden, al revés, en vez que el fundo esté demandando a la minera para que salgan de aquí“, explicó Waldo Sepúlveda, administrador del fundo.
Cabe mencionar que, de acuerdo a las fuentes consultadas en este informe, a la fecha no ha existido un pronunciamiento de las autoridades de Gobierno como tampoco una investigación formal por el eventual daño medioambiental que hoy más que nunca urge averiguar por la inminente llegada de miles de aves a la zona.