La Sección de Criminalística de Carabineros, Labocar Talca, durante estos días, previo a la conmemoración del “Día del niño”, ha implementado una acción comunicacional que se dirige a educar e informar a la ciudadanía a fin de que conozcan claramente los riesgos que implicaría adquirir juguetes no certificados en el comercio informal.
“Como es de conocimiento, los falsificadores aprovechan estos días para vender masivamente variados juguetes de dudosa procedencia, por lo que el llamado por parte de la Sección Criminalística Labocar Talca, es seguir las siguientes recomendaciones”, dijo el Capitán Dixon Rivas.
– Adquirir juguetes y artículos de diversión en el comercio formal y establecido, que cuente con los permisos correspondientes.
– Verificar que el embalaje de los juguetes presente el rotulado y detalle de estos, conforme así lo establece nuestra legislación vigente, debiendo ser clara, legible y en español, la cual debe ubicarse en el reverso de cada caja u embalaje, haciendo presente que dichos juguetes previamente pasan por un proceso de certificación y calidad, antes de ser comercializados.
– Se debe considerar en el embalaje, de manera específica, la edad del menor, a la cual va dirigido el juguete.
– Verificar los materiales de fabricación de los juguetes, como a su vez, que no posean los pernos de sujeción a la vista, haciendo presente que hoy en día dichos juguetes contemplan un proceso denominado termolaminado, permitiendo una sujeción a altas temperaturas sin la necesidad de pernos.
El Oficial sostuvo que aquellos juguetes que ingresan y se comercializan sin el permiso respectivo, no se conoce fehacientemente el material de composición y fabricación de estos, debido que no tienen un control o certificación acorde a su diseño, pudiendo ser altamente inflamables y tóxicos, asimismo, podrían tener partes muy pequeñas y que podrían ser manipuladas por los niños, pudiendo provocar fácilmente accidentes e inferir en la salud de los menores.
“Conocer aquellos productos que no son originales, es fundamental, ya que el comprar o vender estos productos falsificados, es delito, y la forma más fácil de reconocer estos productos puede ser por sus empaques defectuosos, malas impresiones de logotipos y la calidad de la manufactura de estos productos. Recuerde, que la integridad y salud de nuestros niños depende de todos nosotros”, indicó finalmente el Capitán de Labocar.