La medida, que forma parte de “Chile apoya, plan de invierno en Energía”, es una iniciativa que tiene como objetivo ponerle un freno al aumento en las cuentas de energía eléctrica anunciado por la Comisión Nacional de Energía, la cual llegaría a un 40%, por lo que de aprobarse, esta alza no se traspasaría a los hogares de nuestro país.
La iniciativa consiste en la creación de un fondo transitorio de estabilización (Fondo de Protección al Consumidor o FPC) para todos los clientes regulados, que contempla una estabilización total para el próximo periodo tarifario a partir de julio 2022.
El Fondo será constituido y administrado por el Coordinador Eléctrico Nacional, cuyo objetivo es completar el pago que corresponde a cada generador, sin subir las cuentas de los clientes finales, para lo cual se inyectarán USD$2.000 millones.
Cabe destacar que este mecanismo de focalización protege principalmente a todos los hogares y pequeños comercios que consumen mensualmente menos de 250 kWh, quienes no verían alzas durante el 2022, mientras que aquellos que consuman entre 250 kWh y 500 kWh sufrirían un alza máxima de 5%.
Además, quienes consumen más de 500 kWh anotarían un alza máxima de un 10%.