TALCA.- Cada 7 de abril se conmemora el Día Mundial de la Salud y este año el eslogan es: “Nuestro planeta, nuestra Salud”, donde la OMS (Organización Mundial de la Salud) dirige la atención mundial a la interconexión entre el planeta y nuestra salud, como un círculo virtuoso que deben promover todos los actores de la sociedad.
En este aspecto, el Hospital Regional de Talca (HRT) tiene mucho que decir, puesto que se trata de un establecimiento considerado como una industria por su tamaño (104.900 m2 en total) y por el nivel de complejidad técnica en cuanto al manejo de sus áreas y servicios básicos.
El Director del HRT, Osvaldo Acevedo, indicó en este sentido que “el Hospital Regional de Talca es un establecimiento enorme, con más de 104 mil m2, con más de 4 mil funcionarios. Es por eso que no solamente tenemos la misión de cuidar la salud de las personas, sino además promover el cuidado del medio ambiente. Buscamos gestionar
adecuadamente los recursos, buscamos reciclar apropiadamente, dispensar los residuos como corresponde”.
Manejo de residuos
Mensualmente el HRT genera toneladas de residuos, es por ello que en su constante preocupación por garantizar el cumplimiento de la normativa, desarrolla una serie de acciones que promueven el cuidado del medio ambiente.
Carlos Soto, Jefe de la Unidad de Higiene Industrial del HRT explicó que existe un Plan de Manejo de Residuos de Establecimientos de Atención de Salud (REAS), en donde se detalla la trazabilidad de cada uno de los residuos generados y que debido a la pandemia, esta labor creció considerablemente.
“Pasamos de 54 toneladas de residuos especiales generadas el 2019 a 191 toneladas el 2021. En el contexto del DS Nº 6, como establecimiento de salud manejamos Residuos Especiales, Residuos Radiactivos de Baja Intensidad, Residuos Sólidos Asimilables a Domiciliarios y Residuos Peligrosos.
En pandemia se vio afectado el ámbito de los Residuos Especiales, por ser de carácter infeccioso y contaminante. Esto fue creciendo porque hubo más contagios de Covid-19, más hospitalización en UCI y así sucesivamente”, indicó el encargado de la Unidad de Higiene Industrial.
En sus gestiones, el HRT busca dar un valor agregado en cuanto a estrategias de minimización, generando con ello un ecodiseño a cada uno de sus procesos. Es así como promueve el reciclaje, buscando alternativas que permitan aplicar mejoras continuas. “Por ejemplo, en el caso de los Residuos Peligrosos, lamentablemente no podemos evitar su generación, obviamente por los distintos procesos que trabaja, ya sea por sus técnicas
clínicas y tecnológicas, como los servicios clínicos y de apoyo como Laboratorio y Anatomía Patológica, donde se generan estos tipos de residuos”, dijo.
No obstante aclaró que el establecimiento busca siempre alternativas responsables que puedan ser sustentables y que perduren en el tiempo, donde provoquen un impacto positivo, como subsanar de cierto modo la generación de residuos peligrosos.
De hecho el año 2020 el HRT generó 41 mil kilogramos de Residuos Peligrosos, pero a la vez se registraron 67 mil kilogramos de residuos reciclados, “por ende, compensamos con creces la cantidad de residuos peligrosos que eliminamos”, detalló Soto.
Por otro lado, sobre las estrategias 3R (Reducir, Reciclar y Reutilizar) y en el marco de la legislación vigente ley 20.920 de Responsabilidad Extendida del Productor y Fomento al Reciclaje, la institución creó un Huerto de 60 m2 (proyecto piloto) que aparte de apoyar la alimentación de los pacientes, busca generar un ciclo continuo de productos derivados de procesos de materia orgánica, a través de puntos de compostaje, residuos de la Central
de Alimentación, aportando a la reducción de residuos que son eliminados en rellenos sanitarios.
12 pozos
Cabe destacar que el HRT no utiliza agua potable de la red pública (considerada fuente secundaria), ya que cuenta con 12 pozos como fuentes propias de suministro, y esto se debe a un tema estratégico, pues ante una emergencia o corte de suministro, el hospital no se vería afectado, manteniendo la continuidad en las atenciones.
El Jefe del Departamento de Logística del HRT, Cristian Jara, explicó que “estos 12 pozos abastecen todas las necesidades hídricas del recinto.
Como es agua que viene de las napas, el hospital debe clorarla. Para eso existe la Normativa NCh 409 que exige parámetros, donde se pide que el agua esté en condiciones óptimas de potabilidad para el consumo humano. En ese contexto, el HRT se ha preocupado mucho de brindar una buena calidad de agua porque se entiende que es para nuestros pacientes”.
Para lo anterior, existe un funcionario especializado que realiza las mediciones de cloro y potabilidad. Informar además que el HRT cuenta con una matriz de agua con un estanque de 300 litros, en donde se realiza la potabilidad del agua, cada 140 litros de agua se le agrega 40 litros de cloro. Eso va hacia los tanques de acumulación y es ahí donde se
distribuye hacia los distintos servicios para el consumo.
En cuanto al agua residual, Cristian Jara indicó que “nosotros trabajamos como hospital en romper la paradoja porque no podemos pretender prestar salud y no ayudar al cuidado del medio ambiente. En este caso nos preocupamos del tratamiento de las aguas que van hacia el alcantarillado”.
Dicha acción es regulada por la Normativa 609, que exige al establecimiento el control de emisiones de aguas residuales industriales.
“Si las aguas residuales del hospital llegan contaminadas al alcantarillado, por sobre los parámetros exigidos, va hacer más difícil que esa agua vuelva en buenas condiciones a ríos o cauces naturales”, señaló.
El HRT contrató un laboratorio externo certificado que mide parámetros como: grasas, aceites, PH, temperatura, el poder espumógeno, los cuales son medidos durante 24 horas una vez al mes y declarados al ente regulador que es la Superintendencia de Servicios Sanitarios.
“Hasta ahora en el HRT jamás hemos superado estos parámetros, por lo tanto podemos decir que el hospital no contamina más allá de lo que establece la norma”, finalizó.