En Chile, uno de cada cuatro niños presenta algún grado de obesidad, según lo reflejado en el estudio denominado Mapa Nutricional, que efectuó el 2021, la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (JUNAEB). La muestra indicó que en los últimos años esta enfermedad ha ido en aumento, manifestando sobrepeso u obesidad más de la mitad de los estudiantes evaluados y presentando obesidad severa un 7,6% de ellos.
Frente a estas alarmantes cifras, Emilia Giacaman, académica de la Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad de Talca, entregó recomendaciones para el inicio del nuevo año escolar, con el objetivo de mantener hábitos alimenticios saludables durante la época de estudios.
“Todo depende de la edad y del ciclo escolar en el que se encuentre el menor, si está en enseñanza básica o educación media. Lo más importante es establecer correctamente los horarios de alimentación, caso a caso”, indicó la experta.
Entre los tipos de alimento que la académica desaconsejó consumir, se encuentran el té, ya que disminuye la absorción de calcio en el organismo, y el pan, que debería ingerirse en bajas cantidades, uno al día, equivalente a 150 gramos como máximo.
En su reemplazo, la académica recomendó preferir otros productos, como la avena, las frutas y verduras de estación. “Tomar un vaso de leche fresca con plátano es mucho más saludable que una taza de té con pan y mantequilla”, comparó.
Giacaman indicó además que un niño o adolescente debería consumir cinco comidas por jornada. “Junto con el desayuno, el almuerzo y la cena, hay que incluir una merienda de media mañana y otra de media tarde”, precisó.
Otro factor a considerar por los padres es si el establecimiento entrega o no desayunos y almuerzos provenientes de la JUNAEB. “Si el colegio está adosado al sistema de reparto estatal, no es necesario enviar al niño con una colación extra, basta que lleve agua o jugo sin azúcar para su hidratación. En caso contrario, estaríamos fomentando la doble ración y se podría desarrollar algún grado de obesidad producto de esta sobrealimentación”, advirtió la experta.
Por último, la profesora Giacaman recordó que, de acuerdo a la Ley 20.606, los establecimientos escolares no pueden vender alimentos con sellos, y que la venta de snacks en los quioscos del patio está prohibida.
“El único problema es que la ley llega sólo hasta la puerta del colegio. Saliendo a la calle, está lleno de vendedores con golosinas híper-calóricas y productos con sellos de advertencia. La única manera de regular esta situación sería mediante una ordenanza municipal en cada comuna, que prohibiera la venta en esos lugares también”, finalizó.