En Estados Unidos un trabajador de Google fue sancionado por asegurar que una conversación con un chatbot (modelos de lenguaje avanzado que simulan diálogos con respuestas automáticas), había sido tan real, natural y profunda que parecía haber estado hablando con un humano. La compañía lo amonestó y aseguró que no hay pruebas al respecto, ¿puede un robot ser inteligente?, ¿qué desafíos, oportunidades y riesgos trae consigo este tipo de adelantos?, ¿debemos protegernos de las maquinas?
Esta y otras inquietudes serán debatidas con un grupo de expertos, entre los que se encuentra la Dra. María Isabel Cornejo, investigadora y académica experta en Neuroderechos de la Universidad Autónoma de Chile; Tomás Vera, director de investigación y desarrollo de Zenta Group, empresa dedicada al desarrollo de diversas soluciones tecnológicas; y el vicepresidente ejecutivo de Fundación Encuentros del Futuro, Guido Girardi, impulsor de la iniciativa Congreso Futuro.
La actividad organizada conjuntamente por las Vicerrectorías de Investigación y Doctorados; y Sede Talca/Temuco de la Universidad Autónoma de Chile busca generar una conversación que abarque las diversas aristas de la materia: desde los aspectos judiciales y éticos, hasta las últimas innovaciones presentes en el mercado.
Los especialistas estarán de gira por las sedes, ya que, como comenta el Dr. Iván Suazo, vicerrector de Investigación y Doctorados de la Universidad Autónoma de Chile este tipo de actividades permiten «aportar a la descentralización y democratización de la ciencia, fundamentales para que el desarrollo del país pueda ser aprovechado por todos y todas».
Y agrega: «es importante que se divulgue este tipo de temas, que para mucho suenan a ciencia ficción, pero que son cada vez más inminentes. Según Ray Kurzweil, uno de los más influyentes en Silicon Valley, para el 2045 la IA va a ser mil millones de veces más potente que todos los seres humanos juntos».
Guido Girardi comparte la importancia de los profundos cambios que vienen, «es entender que tenemos que generar una manera de convivir, adecuarnos y preservar lo humano, si es que se puede, con esta IA que va creciendo exponencialmente al tiempo que nuestras capacidades van disminuyendo» señala.